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Thailandia, Bangkook.
5 años despues.

Los años pasaron volando, todo habia cambiado en la vida de Porsche podiendo mejorar gradualmente, no supero por completo sus traumas pero ya logro volver a centrarse en su trabajo, como salir sin miedo de casa antes se la pasaba encerrado dentro por solo pensar, que Vegas lo estaba persiguiendo con mucho esfuerzo y terapia, de cierto modo esos recuerdos horribles quedaron ocultos en su mente.

La ayuda piscologica que recibio etos años, fue lo principal por lo que ya no estaba tan metido en sus pensamientos, ahora ya parte de la medicina que le fue dada en el pasado no tenia que tomarla, solo por su ansiedad tenia que cuidarse aunque ultimamente, hace meses no tenia ningun ataque.

Pasaron bastantes cosas, hoy se llevaria al fin la boda de sus queridos amigos, si Kinn y Big se casarian estuvieron planeando todo tiempo atras, y ya era hora de su gran dia.

Porsche no podia estar mas feliz por ellos, se miro una vez mas en el espejo arreglando su traje sonriendo, guardo dinero para poder comprarlo y estaba a gusto con su atuendo.

- Hermano, ya estamos listos. -Chey estaba en la puerta de su habitacion, junto a Macau.- Aqui tenemos nuestros regalos, ya le pusimos una cinta y lo dejamos muy lindo. -mostro dos cajas de diferentes tamaños, estaban decorada de manera muy cuidadosa.

Porschey, llevaba puesto un traje negro con una camisa verde con los botones abiertos, en su cuello tenia una cadenita plateada su cabello tenia pequeños rizos, Macau tambian iba con un traje negro pero con una camisa roja, junto a un collar como el de Chey pero de oro, ambos se veian hermosos ya eran hombres adultos.

- Bien, pueden dejarlo dentro del auto yo ya termino solo tengo que ponerme mis zapatos, por cierto espero que en un futuro tambien verlos casarse. -ese ultimo comentario de su parte, hizo que la pareja se sonrojaran.

- Aun somos jovenes, tenemos que esperar no quiero que Chey se sienta presionado, yo con estar asi con el es suficiente. -Macau apreto la mejilla de su novio, Chey solo se fue rapido por las escaleras si que era timido.

No pudo evitar que se le escapara una risa, estaba orgulloso de ellos por estar tanto tiempos juntos, nunca los escucho discutir en todo el tiempo que han estado, tienen el tipo de relacion que todos quieren y envidian, a Porsche le gustaria tambien poder encontrar alguien asi, que le quiera y no le haga daño.

No a podido estar en una relacion con nadie, tampoco siente que esta listo aunque ya este un poco mas mayor, no le preocupa nunca encontrar el amor es algo que no siente necesario, tal vez prefiere estar solo que con alguien, lo sabra el dia en que se enamore.

Una vez termino salio de casa asegurando de cerrar la puerta, vio como Chey y Macau ya estaban sentados en la parte trasera del auto, hablando entre elos.

- Chicos, los cinturones de seguridad. -Porsche los regaño, al notar que no se los habian puesto.- Solo voy a pedirles una cosa, bueno Chey mas bien a ti no te lleves comida a escondida. -tenia que avisarle, la ultima vez que fueron a un evento su hermano se habia traido una mochila, llena de comida a casa.

- Prometo no hacerlo, pero es dificil amo mucho la comida igual Macau se asegurara, de que no lo haga. -un puchero aparecio en los labios de Chey, sabia que tenia que controlar sus impulsos, pero la comida es tentadora.

¿Can you see me?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora