DIOS ES MUJER

El amor y sus demonios

Desde que crecemos y comenzamos a ir a la escuela nos empiezan a presentar a diferentes personajes históricos o ejemplos de personas que de alguna forma trascendieron en la historia, siendo conscientes de que la "trascendencia" es una de las ambiciones más grandes del humano.
De todos los personajes, hay uno que siempre es el que más resalta, y el más famoso y popular del mundo: Jesucristo.
No se sabe con certeza si existió y a ésto se suma el hecho de que en diferentes religiones se presenta el mismo "mesías" pero con diferente contexto, y hay una teoría reciente que afirma que Jesucristo podría ser la representación del solsticio de invierno, que a mi parecer, vendría a ser la modernización y humanización de los antiguos dioses como el sol y la luna.
El amor, según Jesucristo, debe ser hacia ti mismo pero, debe ser igual al que le das a los demás (poniéndonos el ejemplo de "dar la otra mejilla a quien te golpea en la cara").
Según los griegos, éste tipo de amor entraría en la calificación de amor "agape", un "amor por la humanidad", el amor desinteresado y caritativo.
Éste tipo de amor es bastante inútil, si consideras el vivir en una sociedad con millones de habitantes, y un ritmo acelerado en donde es casi imposible dar algo por los demás sin esperar algo a cambio. Todo se ha vuelto un trueque, como siempre lo fue, una moneda que al ser entregada, se espera la recompensa.
También resulta ser que, en teoría, nadie practica éste tipo de amor en la actualidad porque es poco funcional e incómodo para la gente. Es por eso que cuando vemos personajes que quieren mostrar su caridad y actos de "nobleza", son los más premiados, porque esas conductas casi no se ven sin que haya algún interés de por medio, que en muchos casos, es el reconocimiento y validación por parte de sus audiencias en redes sociales. La gente ama a los mesías pero no practican sus discursos o religiones porque resulta anti natural.
Hay un amor que se descubre muy poco, y los que lo hacen, pocas veces lo ponen en práctica. Es, a mi parecer, el amor más poderoso que existe. También tiene nombre, pero es un poco confuso y a menudo se malinterpreta con soberbia o exceso de ego.
Me gustaría profundizar más en el tabú que hay respecto a éste amor, pero lo dejaré para un próximo blog, porque me gustaría mantener el enfoque.
Resulta ser que por alguna razón que desconozco, las personas asocian el amor propio con la imagen de una persona recatada, que se preocupa en exceso de lo que los demás piensen y es esclava de las opiniones y validaciones positivas de los demás.
Ésto debería ser todo lo opuesto, ya que la "philautia" es el modelo de amor más funcional, pero poco útil para muchos, porque llega a ser terrorífico y controversial. Te vuelve único y la gente no está preparada para ver a personas únicas porque quieren que todos mantengan el comportamiento de rebaño, con doble moral y manteniendo sus costumbres religiosas.
Te llamarán loco, te tacharán de puta o bruja, de homosexual rebelde, entre otros calificativos, creerán que eres raro o diferente, pero al final siempre van a admirar tu libertad.