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Veo la entrada de la mansión en la que voy a vivir de ahora en adelante, ¿Esta es realmente la casa de un capitán?

-Esa preciosa- paso el portal que me da el acceso al jardín delantero, camino por un pequeño camino de piedras blancas hasta llevar a la puerta, respiro profundo y todo la fina madera con mis nudillos, espero a que alguien abra.

-¿Si?- una señora mayor, de apariencia dulce y gentil es quien me recibe - ¿Le puedo ayudar en algo?-

-Mi nombre es Do Kyungsoo, soy el hijo mayor de la familia Do y-

-Claro, usted es el prometido del joven amo, ¿Por qué se vino con estas lluvias? Nosotros íbamos a ir por usted mañana para que tuviera tiempo de organizar sus pertenencias?- sonrió – Por favor pase, le preparare algo caliente – ingreso y ella coloca su mano en mi espalda – Mire lo mojado que está, está helando haya afuera y usted empapado con estas lluvias-

-Mi padre dijo que me necesitaban hoy aquí, por eso vine, si les causa molestias puedo ir al pueblo y venir mañana-

-¿Cómo se le ocurre? Por favor sígame, le prepararé algo caliente mientras se cambia- la sigo por un pasillo, desliza una puerta y me muestra el interior de una habitación el triple  de tamaño de la que anteriormente era mi habitación – Puede estar tranquilo, el joven amo mando a traer sábanas nuevas para usted, y coloco todo lo que él creía necesario por el momento, ya luego usted puede ir colocando lo que desee, ¿Cuándo traen su equipaje?-

-Este es mi equipaje – le muestro mi pequeña bolsa de tela con mi ropa – No tengo más pertenencias por traer-

-¿En serio? Está bien, luego se solucionará eso- ella me sonríe.

-Muchas gracias, uhh, que pena, ¿Cuál es su nombre?- ella se ríe.

-Que vergüenza, se me olvidó presentarme por culpa de la emoción- se subte la boca con sus delicadas manos – Mi nombre es Kim Mi-kyung, voy el ama de llaves de la mansión y mucama personal del joven amo, he estado con él desde que era un bebé, cuidare muy bien de usted – ella sonríe de una manera tan cálida – Por favor cambiase, le traeré un té caliente y lo llevaré con el joven amo- sale de la habitación, dejo mis cosas sobre el tocador, me cambio de ropa, dejo la que traía extendida cerca d la ventana, me siento un momento sobre la cama y la diferencia con el piso es muy notable, creo que la última vez que dormí sobre una cama real tan solo tenía 4 años.

Abren la puerta y me coloco de pie, veo a la señora Kim, traje una bandeja con Té y sopa.

-Por favor coma, se ve muy pálido – le regaló una pequeña sonrisa.

-Gracias-me siento y empiezo a comer mientras ella me va haciendo preguntas.

-¿Qué edad tienes querido? Solo nos dieron tú nombre y el nombre de tu familia-

-Tengo 19 años- ella me ve de una manera dulce – ¿El joven Kim cuántos años tiene?-

-El tiene 27, es capitán en la milicia y es un joven con un corazón muy lindo, solo que han pasado cosas que lo han hecho ser frío y distante- asiento de manera pausada – Cuando termines de comer lo llevo con él, tranquilo –  termino de comer, recojo las cosas y me como de pie.

-Vamos, llevaré esto para lavarlo antes de conocer al joven Kim- ella me quita la bandeja.

-No es necesario, yo me encargo de eso, así que dejaremos esto en la cocina y vamos con el joven amo- Sale de la habitación y lo único que puedo hacer es seguirla, vamos hasta la cocina y ella deja todo en el lavaplatos, camina de nuevo a la salida y yo la sigo.

Caminamos por el pasillo hasta llegar al fondo del mismo, ella toca la puerta con cuidado.

-Joven amo, aquí está su prometido, el joven Kyungsoo de la Familia Do – abren la puerta con fuerza y mi reacción es correrme hacia tras – Joven él es-

-Te iban a recoger mañana ¿Qué haces aquí?- no soy capaz de responder – Habla-

-Mi padre me mandó, dijo que me necesitaban hoy aquí para ayudarlos a la limpieza- trago – Yo puedo retirarme y venir mañana, no deseo incomodarlo señor-

-Joven amo, el chico llegó bajo la lluvia, y ya está aquí, que llegará hoy o mañana no hay diferencia, ya todo estaba listo- me ve y siento tanto frio en su mirada que hace que me sienta pequeño.

-Mañana hablamos- cierra la puerta y solo me puedo encoger en mi puesto .

-No lo tome personal Joven, a él no le gusta que le cambien sus planes y realmente el deseaba ir personalmente a buscarlo para hablar con su padre-

-Tranquilo, entiendo, lamento causarles molestias- hago una reverencia – Yo realmente puedo irme al pueblo y buscar donde quedarme y mañana regreso-

-¡No!, se va a quedar aquí, va a dormir y mañana hablamos con él, no se preocupe- me toma del brazo con dulzura y me guía hasta la habitación – Por favor descanse, se ve muy cansado-

-Muchas gracias- ella cierra la puerta, me quito la ropa y me coloco la de dormir, me acuesto en la cama y la sensación de dormir aquí a dormir en el suelo es fan diferente- Que cómoda- cierro los ojos y simplemente me quedo dormido.

Me despierto en cuanto escucho a los primeros pájaros cantar, me estiró sobre la cama y por primera vez la espalda no me duele.

Me cambio de ropa, recojo mi cabello, ya necesito cortarlo, es insoportable para mi tenerlo así y más cuando estoy trabajando bajo el sol.

Salgo de la habitación, busco el baño y en cuanto lo encuentro hago todo lo que necesito hacer, incluso había cepillos nuevos.

-Luego se lo pago- salgo, voy hasta la cocina y preparo el desayuno, cuando está todo listo lo dejo servido en la mesa y los cubro, salgo y busco como salir al jardín, cuando lo logro veo a varias empleadas, las saludo y ellas me ven extrañaras – Buenos días, uh, mi nombre es Kyungsoo, estoy buscando el cuarto de suministros para la limpieza del jardín-

-Eh, si, claro, mira es ese – me señala una puerta - ¿Eres el nuevo empleado?-

-Asi es- para que negarlo, así así será dentro de muy poco – Muchas gracias – tomo lo que necesito y empiezo a hacer la limpieza del jardín, en un momento escucho como saludan a alguien, me doy la vuelta y veo a quien es mi prometido.

-¿Qué estás haciendo?- se acerca a mí y me quita lo que tengo en las manos – Eres mi prometido ¿Qué haces limpiando? ¿La señora Kim te dijo que lo hicieras?-

-¿Qué? No, solo que no sabía que hacer y estoy acostumbrado a hacerlo – Me toma del brazo.

-Él no es su compañero de trabajo, es mi prometido, es el nuevo amo de la casa y deben obedecerlo ¿Entendido?-

-Si señor-

Feliz matrimonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora