Orquídea azul

capítulo 12

**Capítulo 12: Cuidando del Futuro**

El estómago de Ray comenzaba a crecer, y a medida que pasaban los días, la curiosidad por el bienestar de su bebé crecía junto a él. Finalmente, no pudo contener sus inquietudes y se volvió hacia Alex.

“Alex, ¿crees que deberíamos hacer chequeos para asegurarnos de que el bebé está bien?”, preguntó Ray, mirando su vientre con preocupación.

Alex reflexionó por un momento y luego respondió, “Ray, en nuestra especie, los bebés son un tanto complicados. Pero no te preocupes, tengo una idea. David es un partero de la realeza en mi planeta. Ha asistido en numerosos nacimientos de nuestra especie. Debería venir en los próximos días para ver al bebé y asegurarse de que todo esté bien.”

Ray se sintió aliviado al saber que habría ayuda especializada. A pesar de todas las sorprendentes revelaciones y desafíos que habían enfrentado, comenzaba a aceptar su nuevo papel en esta historia inusual. El bebé que llevaba dentro era parte de él y de Alex, y juntos estaban decididos a cuidarlo y protegerlo.

Poco después, David llegó con noticias impactantes. Mientras examinaba a Ray, reveló: “Ray, tengo una sorpresa para ti. Estás esperando no uno, sino dos bebés.”

Ray estaba sorprendido por la noticia. “¡Dos bebés! Eso es increíble.”

David asintió y procedió a explicar cómo sería el proceso. “En nuestra especie, los portadores, es decir, el ser que lleva a los bebés, experimentan un embarazo similar al de los humanos. La diferencia es que los bebés están dentro de huevos. Después de los nueve meses, traeremos una máquina que extraerá los huevos sin causar ningún dolor. Luego, tendremos que esperar a que los bebés rompan sus cascarones y nazcan.”
Alex sintió cómo todo a su alrededor se volvía borroso al recibir la noticia de que estaba esperando gemelos. La idea de que la sintonía de almas, un fenómeno que ocurría solo cada miles de años en su planeta, estuviera sucediendo con él y Ray, lo dejó atónito.

Ray, por su parte, estaba lleno de curiosidad y nerviosismo. Esperó a que David terminara de dar las noticias y, finalmente, preguntó tímidamente: “David, perdona mi pregunta, pero ¿cómo es el sexo entre los de tu especie? Y, ya sabes, conmigo en este estado… ¿podré hacerlo?”

David sonrió con amabilidad. “No tienes por qué disculparte, Ray. Es natural tener esas preguntas. Nuestra especie siente una conexión espiritual única durante el acto, lo que lo hace muy especial. Y sí, aún puedes tener intimidad en tu estado, pero con algunas precauciones. Estaré aquí para guiarte en todo lo que necesites.”
Alex estaba perdido en sus propios pensamientos y preocupaciones, sin prestar atención a la conversación entre Ray y David. La noticia de los gemelos había conmocionado a Alex, y su mente estaba llena de preguntas y ansiedad sobre lo que les deparaba el futuro.

La conversación abierta y honesta ayudó a aliviar las preocupaciones de Ray, y comprendió que, a pesar de las diferencias, estaban dispuestos a enfrentar cualquier desafío juntos. El amor entre Ray y Alex estaba creciendo, y la llegada de gemelos solo fortalecía su determinación para cuidar de su futura familia.