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Episodio 17

-¿Hijos?

-Dejaremos el territorio a ellos hasta que nos casemos y tengamos hijos.

-No, quiero decir, ¿tú y yo?

¿Era eso lo que realmente quería decir?

Ante mi insistente pregunta, Ryan me respondió como si no entendiera.

-¿Qué tiene de malo que una pareja casada tenga un hijo? Tú también naciste así, ¿no?

Lo sé en mi cabeza, pero incluso así, es extraño escuchar a un niño de once años hablar de hijos.

«Su Majestad, debe haberse sorprendido mucho.»

Aunque no había nadie que pudiera superar al Rey en fuerza física, por mucho que fuera así, ¿cuánto se habría sorprendido con esta situación?

-Gracias a eso, Su Majestad me regañó.

-¿Qué?

Ryan me mostró el vendaje en su muñeca.

-¿También te enfrentaste a Su Majestad?

-Parece que te aprecia mucho.

A diferencia de mí, que apenas tocaba la espada de madera, Ryan había usado una espada real en el duelo.

-¿Estás vivo, verdad?

-...De alguna manera lo soporté. Su Majestad es una persona muy fuerte.

Hablaba con calma, pero su cuerpo estaba lleno de marcas de heridas.

-¿No te duele?

-Ya estoy acostumbrado a esto.

No es fácil para un niño de esa edad enfrentarse a adultos en igualdad de condiciones.

-Eres increíble, ¿cuándo aprendiste a manejar la espada?

-Hace mucho tiempo.

A pesar de tener sólo once años, este chico siempre hablaba como si hubiera vivido mucho. Y al ver a Ryan tan serio, Su Majestad seguramente...

-Su Majestad, ¿se rió?

-Me dio vergüenza que se riera tanto.

-Es normal.

Su Majestad no tenía ni una pizca de intención de llevar este compromiso hasta el matrimonio.

Era sólo una medida temporal para evitar que Montpellier, que había dominado a los nobles, se deshiciera de la familia Granada para liderar el norte.

-...Y luego me sugirió que me comprometiera con la princesa Floria otra vez.

-No me digas que le dijiste que tiene novio.

La princesa Floria, la hija legítima del rey, debe casarse con al menos un Duque, o incluso con el Rey de un país extranjero. Los nobles no han dejado de discutirlo.

Si de repente se difundiera el rumor de que Floria y Kai están saliendo, aunque Kai sea de una clase social mucho más baja...

Sería horrible sólo de imaginarlo.

-No dije eso.

-Menos mal.

Ryan notó mi obvio alivio y dijo con un tono casual.

-En cambio, le dije que me gustaba Asta.

-¿Eh?

Sorprendida por la confesión inesperada, pronto comprendí la intención de Ryan.

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