Prólogo

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Y allí estaban las dos chicas, mirándose con sus corazones latiendo a mil por hora. Kang Ari no sabía si se alegraba de tener a Bada Lee solo a unos metros de distancia. Y Bada sentía un sentimiento amargo al volver a verla ahí sentada con su equipo.


"Tengo ganas de verla bailar"

"Mi no respect dancer es..." 



Las mentiras que nos dijimos- Bada LeeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora