Date A Live: Pecados Del Pasado

Los Olvidados

-Nunca pensé en ganarme la vida lastimando a otras personas, la verdad, no veo con malos ojos a los boxeadores, nunca lo haría, al final es un acuerdo mutuo para dar todo de sí, sin embargo, en el fondo de mi corazón, eso no era para mí, realmente no sentía pasión alguna por ese deporte, solo lo hacía porque-

- ¿Porque querías protegerlo? -

-Me interrumpió mi mamá Reine cuando estaba contando mi relato, honestamente, si, ese era el motivo. Conforme ganaba más peleas podía permitirme comprar más cosas, sobre todo para él, recuerdo que cuando gané mi primera pelea fui a una pizzería cercana para comprar una pizza con lo que gané gracias a la pelea, estuvo muy feliz cuando la traje, la verdad es que ese día no cené nada, solo lo vi comer, eso era suficiente para mí-

- ¿Por qué no lo llevé a un lugar mejor? Bueno, se lo que se siente ser un huérfano, se lo que se siente estar en un horrible orfanato-

-Se que tanto le importamos al mundo: nada. La gente se suele llenar de palabras sobre proteger a los niños, pero simplemente somos usados para elevar el ego de muchas personas nefastas. Si en japón el asunto de los huérfanos era nefasto, en otras partes del mundo puede ser muchos peor, desde personas que los usan para tomarse fotitos y hacerse los héroes, hasta otros que simplemente les hacen todo tipo de cosas horribles. Realmente, nunca le hemos importamos al mundo-

-¿Saben? Siento que muchas veces no tomamos en cuenta el daño a largo plazo que genera no hacer nada, no solo las personas que les hacen daño directo son malos, también lo son aquellos que inflan sus egos diciendo que los cuidan; para tan solo dejarlos a su suerte cuando ya no les son útiles, los que les dan su indiferencia, los que hacen mala cara al verlo como si fuesen una plaga, los que ignoran nuestra existencia y siguen adelante, todos ellos son igual de malos-

-Tal vez esa era una de mis motivaciones a la hora de pelear, me importaba un comino la fama o la gloria, tan solo quería que el tuviese algo mejor, puede ser tonto ¿no? Ni siquiera era mi sangre, ni si quiera era japonés como yo, aun así, era tan cercano su dolor al mío, que parecíamos ser como uña y mugre, aunque puede sonar hipócrita comparar mi dolor con el suyo... Hubo un punto en donde despreciaba ver a familias felices, niños que tuvieron la dicha de tener a sus padres, pero, por otro lado, en esos infiernos hay niños que piden por ayuda, ¡la que sea! -

-Mientras yo lloraba porque mami me abandonó en una casa cómoda, con una agradable familia adoptiva-

-Ellos querían alguien que los pudiera liberar del infierno-

-Creo que... de nuevo me estoy desviando-

-Toda esta ira que me tiene por dentro, tarde o temprano acabará conmigo si no la libero, pero creo que en aquel momento encontré una forma de liberarla, cada vez que encajaba mi puño en el cráneo de alguno, liberaba todo el enojo dentro de mí en sus malditas caras...-

-Shin, respira por favor-

-Shido, ¿Toma un poco de té para calmarte?

-Lo agradezco de todo corazón, Kurumi, pero... es que es algo extra que siento es...

Es como una... Angustia que me atrapa

Como si fuera un truco del que soy presa

Siento que estoy en una prisión la cual me mata

Es un sentimiento que quema

- ¿Sientes qué?

-Por alguna razón eso me salió de un lugar extraño, no sé cómo expresarlo, es solo como si yo... yo tuviera algo dentro de mi interior que quiere salir... creo que comprendo a los tipos de los musicales, es una sensación extraña es como si quisiera romper las cosas usando palabras-