El Diablo Que Llevas Dentro

221 24 24
                                    

-Existen cosas que nos condicionan como individuos, factores tan simples como el oficio de nuestros padres, el lugar donde vivimos, situaciones de las que nosotros experimentamos al día a día, son las que pueden definirnos como individuos en el futuro, hay quienes dicen que nosotros podemos controlar ciertos impulsos provenientes de nuestro interior. Pero, al fin de cuentas, para bien o para mal, en muchas ocasiones es imposible negar nuestra propia naturaleza-

-Las personas dicen que podemos cambiar con el tiempo, aunque, hay ciertas cosas que nunca van a cambiar por más que nos lo neguemos a nosotros mismos-

-Hay muchas palabras para aquel lado que no nos gustó mostrar pero que existe dentro de nosotros, desde lado oscuro, hasta algunos más extremos dirían que es el demonio que vive dentro de nosotros-

-Pero, al final de cuentas, depende de cada quién saber cómo utilizar aquel diablo que vive dentro de ti-

-viernes por la tarde, un día más de mi vida, trabajo en la constructora encargada de hacer un nuevo hotel en una zona central de la ciudad, recuerdo el lugar en donde construimos, antes solía ser un teatro abandonado, para bien o para mal tuvo que ser demolido, pero no se le puede decir nada al progreso-

-La paga no son los millones que muchos desearían, pero de eso a rezar porque algún tonto tire comida al lavabo haciendo que se le tapen las tuberías para si quiera tener algo con que comprar un mísero pedazo de pan, pues oye, por mi bien-

-En fin, la verdad me hubiese encantado que después de mi jornada laboral yo me haya ido a cenar a mi casa con mi hermosa familia que atesoro, pero no-

-Me fui al bar local a beber hasta que pudiera vomitar, como otros en ese lugar, la cerveza ni si quiera sabía bien, pero poder sacarme de la cabeza un mísero rato todas las cosas que me abrumaban era algo que podía atesorar con una gran fuerza, aunque bueno, en esa noche, habría algo diferente-

-Me encontraba caminando por lo que era una calle de las tantas que había en la gran manzana, tambaleando intentando saber en qué lugar me encontraba, pero pues no es fácil hacerlo en ese estado, pero lo que cambió mi rumbo, fue, algo extraño, era un llamado, una señal, tal vez del cielo, algo que no pude evitar ignorar, era un grito, femenino-

-Por alguna razón, eso me había sacado del estado alcohólico, y ahí me hallaba, parado de una forma muy firme mientras miraba a la nada sin ningún rumbo aparente, pero cuando menos lo esperaba, mis piernas habían comenzado a moverse, por no decir que había comenzado a correr-

-Y ahí es donde pude verla, una joven, posiblemente de veinte años, a su lado había tres tipos, uh... eran de la misma construcción que en la que trabajaba, al parecer estaba acosándola, con unos tragos algunas personas son capaces de hacer cosas que las que normalmente no se atreverían, yo lo sabía muy bien, demasiado bien-

-Por el movimiento inconsciente de mi cuerpo, yo había llegado hasta aquel lugar en donde por algún motivo, me lancé a uno de ellos, un golpe fue directo a su mejilla, uno y otra vez, podía ver cómo el mundo era muy lento, tal vez el alcohol junto a la gran adrenalina del momento hizo que estuviera así. Tras haber dado dicho combo de golpes, vi un diente salir de la boca de ese sujeto, seguido a ello uno de sus ebrios acompañantes quiso ayudarle, pero yo le di una patada en seco en el estómago para hacerlo a un lado, creo que hasta se vomitó en el lugar-

-En ese lugar solo quedaba uno más, con la misma velocidad con la que vine, me lancé hacía el para comenzar a golpear al sujeto, una por cada maldita cosa que me había sucedido en la vida, ese sujeto estaba sirviendo para algo, cuando por fin había reaccionado, ahí me hallaba, inerte con la mano ensangrentada debido a que le había roto la nariz al tipo, y a mi lado estaba la joven viéndome de una forma rara, como si yo fuera un ser raro: un ángel que la vino a salvar, pero yo, solo era un demonio que vino a desquitar toda la frustración acumulada durante años-

Date A Live: Pecados Del PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora