Los celos no son buenos.
Roier había tenido una discusión con cellbit, ya que el habia salido con Quackity y se tuvo que quedar a dormir. No llevaba ropa asi que el nombrado le presto uno de sus suéters.
Al momento de regresar cellbit vio que roier traia el saco de su ni tan grande amigo y penso en todas las cosas posibles.
Roier al verlo noto que algo estaba mal, su esposo se miraba molestó a un nivel superior a los otros.
"¿Que pasa gatinho?" pregunto inocente el pequeño. "Que mierda traes puesto roier." al escuchar el tono de voz del portugues se puso alerta.
Sabia que era celoso pero no a que punto. "Es por el sueter de Quackity? Solo me quede a dormir y como no tenia ropa el insitio en prestarmelo." cellbit aun no le creia.
"Pues quitatelo ahora." le hablo molesto. "Por supuesto que no cellbit, ahora no puedo usar ropa de alguien? Querias que me viniera desnudo por toda la maldita isla!?" la cara de roier se volvio molesta.
Cellbit entendio que tenia razón pero aun estaba molesto, su orgullo no le permitia dejarlo asi. Pero lo que no pensaba era que el orgullo del mexicano era mucho mas grande.
"Eso no me interesa quitatelo".
Roier
Acaso lo ordeno? Se atrevía a obligarlo por celos?.
"Sabes que cellbit, jodete tu y tus maliditos celos, me case contigo porque eras buena persona, amable y respetuosa.. Liberal. Pero veo que me equivoque." sintio miradas y volteo a la puerta observando como 2 pares de ojos lo miraban.
Los niños... Malditasea.
"Quedate con tus estúpidos pensamietos... Bobby!" grito el nombre del pequeño quien rapidamente entro con el a la habitación. "Mande papi" hablo la criaturita.
"Nos vamos."
Eso le tomó por sorpresa a cellbit y rapidamente lo nego. "No puedes llevartelo"
"Claro que puedo, es mi hijo y decido por el. Adios cellbit." entonces Roier cargo a Bobby y salio del castillo para dirigirse a su casa.
En cambio cellbit estaba sentada en el suelo con la mirada en el piso. Escucho pasitos acercarse a el. "Pai tudo bem?" cellbit tomoba richarlyson y lo abrazo. "Bobby y pai roier volverán verdad?"
"Si filho... Si." richarlyson asintio.. Aun sabiendo que roier estaba claramente molesto con su papá y no volveria en un par de dias.
[...]
Y asi fue, roier no volvio a pisar el castillo durante una semana. Cellbit penso que ese había sido el divorcio. Se deprimio. Bagi su hermana trataba de animarlo, pero este se negaba a la ayuda.
Todo estaba mejorando hasta que, sonó el timbre de la entrada.
Cellbit bajo y al abrirla se le fue el aire.
"Guapit-" antes de poder decir algo, roier bajo a richarlyson de sus brazos.
"Solo vengo a traerte a richarlyson, al parecer escapo, maxo lo encontro bagando por las fabelas y me dijo que me buscaba." suspiro pesado roier. "Me lo entregaron, pero es tu hijo, aqui esta"
Cellbit quiso agarrar a richas pero este corrio a los pies del mexicano.
"Pai roier.. Pai roier regresa!." el niño parecia apunto de llorar. Eso hizo sentir mal a roier pero no podia hacer nada. Maldito orgullo de mexicano.
"Lo siento richarlyson, debo irme." roier estaba apunto de irse cuando los brazos de cellbit lo rodearon. "Suéltame." este nego con la cabeza repetidamente. "Sueltame cellbit, aprende a controlarte, cambia." intento apartarse. Pero cellbit lo beso.
El beso mas desesperado de su vida, torpe que hasta parecia inexperto. "Guapito... Porfavor perdoname, te prometo que cambiare." suplicaba.
"Porfavor.. No es lo mismo sin ti. Roier dame otra oportunidad." sintio temblar el cuerpo contrario. Lo miro y observo que roier contenía lágrimas. "Cuantas mas cellbit?.. Que mas quieres de mi." dijo mordiendo sus labios.
"Roier dame esta oportunidad nadamas.. Los celos no buenos Porfavor roier.." este se la penso.
"Esta bien.." dijo tratando de calmar al brasileño. "Gracias Roier... Puedo verte mas tarde?" el asintio.
Trataria de recompenzarlo.
[...]
Cap corto pero importante. MUY importante.
Los celos no son buenos genteeee.
Siento que... Nose xD.
En fin.
Como estan?
Volvi y no crean que por mucho 😧.
C
ualquier falta de ortografia la correjire luegop. Chau.
Los quiero mucho bola de huevones.
Fern_andius.
