Siempre pensé que amar venía incluido con el dolor y las penurias.
Creí que era normal sentirme tan consumida qué ya no tuviera ni siquiera fuerzas para sostenerme.
Estaba convencida de que era normal ver como el mundo avanzaba y yo me quedaba paralizada por no saber controlar lo que sentía.
En una cosa no me equivocaba, quizá eran dos.
Siempre fue correcto qué para amar realmente hay que hacerlo con locura e intensidad.
Pero...
Estaba errada creyendo que eso; a fuerzas, tenía que dolerme.
No, amar no duele.
Porque te amo con locura y eso solo me trae alivio.
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Cartas a mi estrella
PoesíaPodré ser poeta, podré adornar mis desdichas y sumergirme en ellas como si fuese lo más normal de mi vida. Pero, ahora pienso: ¿Qué hay del amor? ¿Qué hay de eso ahora que sí tengo cosas buenas que decir sobre él?