||Accidentes II Todoroki Shoto

6. Un rincon oscuro

Mitzuki no se sorprendió al encontrar vacío el otro lado de su cama. Según el reloj, había dormido dos horas, por lo que podía suponer que Todoroki había esperado a que ella se durmiera para poder irse. Seguramente todavía estaba avergonzado por las reacciones de su cuerpo. 

Lanzando un suspiro se metió debajo de las sábanas. De nada le servía sobre pensar las cosas, tenía que respetar los tiempos del mitad albino si deseaba que lo que sea que tenían entre ellos continuara. 

Antes de volver a cerrar los ojos, se preguntó si Todoroki podría dormir bien con todo lo ocurrido. 

                                                ...

Al entrar al salón de clases y encontrar con la mirada al mitad albino hizo lo posible para no reírse en voz alta.  Era más que obvio que el pobre no había dormido, no solo porque su corbata (usualmente colocada correctamente) estaba torcida sino porque tenía la cabeza recargada en su puño con los ojos cerrados y debajo de ellos había unas marcadas ojeras grises.

Dejó su mochila en su banca, aún faltaban 5 minutos para que las clases iniciaran así que  camino hacia su compañero con una risa burlona en su rostro. 

- ¡Todoroki!- exclamó, golpeando con sus palmas abiertas su escritorio, logrando que él abriera los ojos, asustado, y se enderezara por completo.  No pareció comprender que era lo que pasaba de manera inmediata, cuando la reconoció, un ligero rubor le tiñó las mejillas.  - ¿Estas bien? - le preguntó ella con voz inocente. 

Él suspiro pesadamente, antes de volver a recargar su cabeza en su puño, pero ahora mirando en su dirección, aunque no a sus ojos.  

- Tengo sueño-. Respondió con voz neutra.  

- Creo que eso es algo obvio-. Aseguró divertida. Miro a su alrededor solo para comprobar que no había alguien cerca de ellos- Pero, en realidad, te lo preguntó por qué ayer te fuiste sin decir nada. 

Él se tensó ante sus palabras, abrió y cerró con nerviosismo su mano. 

- No quería molestarte-. Murmuró 

- Y aun no respondes mi pregunta-. Se apresuro agregar. 

Él se quedó en silencio un segundo. 

- Preferiría no hablar de eso aquí, Yaoko. Pero... supongo que estoy bien, algo agobiado, quizá- Confesó.

Mitzuki no podía entender bien la razón por la cual él se sentía de esa manera. Por su propia experiencia, cuando descubrió el placer de la masturbación y tiempo después al estar con un chico, las sensaciones que la persiguieron fueron de ansiedad, no una negativa claro, sino una que estaba acompañada de querer más... No podía explicarlo con palabras exactas, solo podía recordar que había entrado en una etapa de frenesí. Ella nunca se había sentido agobiada, y por ello se preguntó si esa emoción sería suficiente para que él quisiera ponerles freno a sus actividades. 

- ¿Podemos hablar de eso más tarde? - Le preguntó

Él la miro a los ojos un momento antes de asentir lentamente, y ella pudo ver una emoción intensa en su mirar, pero no pudo ponerle nombre.

- Hola, chicos. Buenos días-. Los saludó Uraraka, sentándose en su banca junto a Todoroki. 

- Hola, Ochaco-. Le respondió ella, girando su cuerpo para verla- ¿Cómo estás?