||Accidentes II Todoroki Shoto

10.- Comerse el mundo

NA: El desarrollo de este capítulo tiene varias descripciones que pueden ser muy de relleno, tener en cuenta al leer.

______________________________________________________________

Al final, Mitzuki había dejado sus pertenencias en la habitación de invitados, a pesar de que Fuyumi había insistido en qué podía pasar la noche con ella, pero la habitación de invitados era la más cercana a su compañero, así que se había inventado una pequeña excusa para poder quedarse ahí, con la esperanza de que el heterocromático la visitara por la madrugada.

Pero desecho la idea después de ver cómo Shoto cabeceaba por el sueño. Lo dejó en su habitación, al llegar a la suya solo cambió su ropa por un pijama y se durmió de inmediato.

.
.
.

Eran las 8 de la mañana cuando sonó su alarma. Se quejó unos segundos después de apagarla, intentando tomar otra posición y volverse a dormir, pero unos golpes en la puerta le hicieron reaccionar. Cierto, no se encontraba en los dormitorios.

-Mitzuki- La llamó Shoto desde el otro lado de la puerta. Dio otro parte de golpes - Mitzuki, ¿Estás despierta?

- ¡Si! - Respondió lo más alto que pudo.

La puerta se abrió lentamente, dejando ver a su compañero; quien vestía un pantalón recto color caqui y un suéter azul oscuro, su cabello estaba algo húmedo así que supuso que había tomado una ducha. Maldición, él ya estaba listo para recibir el premio Nobel y ella tenía baba en la barbilla, fue vergonzoso.

Se colocó boca abajo, haciendo un sonido de mortificación en lo que él se acercaba a la cama.

-¿Estás bien? - Le pregunto, genuinamente curioso por sus acciones. ¿Podía respirar de esa manera?

-Me veo fatal y tú estás cómo un modelo ¿Qué necesidad hay de humillar al prójimo? - Su voz estaba distorsionada debido a las almohadas, pero se podía notar su molestia.

Todoroki frunció las cejas con confusión -Ah, ¿Debería de cambiarme entonces?

Ella bufo.

Claro, él no entendía.

Se dio la vuelta de la manera menos estética y bonita posible, para enfrentarlo recién levantada.

-No, no quiero que te cambies, te ves asombro. Me refiero a que son las 8 de la mañana de un sábado, ¿Por qué te has levantado tan temprano? - Le preguntó mirándolo fijamente.

Los bordes de su boca se elevaron en una pequeña sonrisa al verla luchar con su cabello.

-Siempre me levanto temprano para entrenar, es ya una costumbre.

Mitzuki gruñó. -Ustedes los hombres y sus entrenamientos matutinos.- Termino diciendo entre dientes. Para ella dormir era un lujo muy preciado, así que solía entrenar por la tarde. Los fines de semana eran los días donde disfrutaba de dormir largo y tendido.

-Podemos salir más tarde si quieres descansar- Ofreció el albino.

-No-. Negó ella, sentándose y restregando sus ojos con el dorso de las manos - Entre más rápido estemos en el centro, mejor. Podremos entrar a las tiendas sin que haya tanta gente.

- ¿Aún seguimos con el plan "Hacer enfadar a Endeavor"? -Cuestionó con esperanza.

Ella se rio y asintió.

-Por supuesto, no puedo pensar en una mejor manera de pasar el día.

Él se levantó de la cama. -Entonces, te dejo para que te alistes. Te espero en la cocina.