Ella sigue leyendo más libros, perdiendo su hermoso tiempo en ellos y leyendo versos y párrafos que ella se grabaría en la piel.
Me armo de valentía y me acerco a ella.
-Disculpa-digo llamando así toda su atención, sus hermosos ojos me miran sonrientes- ¿Tenéis algún ejemplar de Romeo y Julieta?
-Sí, seguro. En el tercer pasillo a la derecha está todo lo que tenemos de Shakespeare.
-Muchas gracias por tu ayuda.
-De nada, para eso estoy aquí.
Ella me deleita con su mejor sonrisa y yo siento que estoy tocando las nubes, es hermosa.
ESTÁS LEYENDO
Bibliothécaire|| n.h
Fiksi PenggemarEn la que ella amaba a los libros y él la amaba a ella.