Serie de los LCW 06 - El Leopardo que Cambió sus Manchas

Capítulo 5

Minho estaba nervioso, lo cual era una nueva emoción para él, porque él nunca dejó que sus nervios sacaran lo mejor de él. Pero no podía evitarlo. Por primera vez, se sintió completamente fuera de su elemento y no quería arruinar las cosas.

Al llevar a Taemin hacia su coche, Minho no podía resistir la tentación de seguir tocando al Beagle en la parte baje de su espalda. A decir verdad, Minho quería hacer mucho más que eso. Quería que sus manos recorrieran todo el cuerpo de Taemin. Los pantalones que llevaba acentuaban su culo perfectamente, y prácticamente rogaban a Minho extender la mano y acariciarlo.

Cuando llegaron al coche, Minho abrió la puerta del lado del pasajero, y sus cuerpos se rozaron brevemente. Respiró hondo y olio el olor del deseo dejar a Taemin. Esto resultó ser la ruina de Minho.

Bajo la cabeza, atrapo sus bocas en un beso duro. Taemin dejó escapar un pequeño grito de sorpresa, pero rápidamente se calmó. Incluso abrió la boca y dejó que Minho barriera su lengua dentro.

Maldita sea, pero Taemin tenía un buen sabor. Tanto es así que el sabor no era suficiente, y antes de que Minho lo pensara, lo que estaban haciendo fuera.

Allí mismo, en el campo abierto donde cualquiera podría tropezar con ellos en cualquier momento.

A Taemin no parecía importarle, tampoco. Metió los dedos por el cabello de Minho y ladeó la cabeza a un lado para dar a Minho mejor acceso. Él incluso dejó escapar el más suave de los gemidos. Fue movimiento sumiso que hizo rugir al leopardo de Minho con deleite.

Fue sólo la necesidad de oxígeno que hizo que Minho finalmente se echara hacia atrás. Miró a Taemin, teniendo los labios hinchados por el beso y las mejillas sonrojadas mientras preguntaba cómo era que nadie había capturado a este hombre ya. Cualquiera que fuera la razón, no importaba, porque ahora Minho le tenía, y él no está pensando en renunciar en cualquier momento pronto.

Minho frunció el ceño. Ahora, ¿de dónde venía ese pensamiento? ¿Qué paso con el no permitirse entrar en una relación? Pero una mirada más a Taemin le hizo replantearse esos pensamientos. Sólo la idea de alguien más besando a Taemin hizo hervir a Minho de ira. Así que si Minho no le impedía, entonces ¿cómo podía evitar que eso suceda?

Minho dio un paso atrás y se aclaró la garganta con torpeza. ―Es mejor que nos pongamos en marcha.

―Sí, probablemente deberíamos―, dijo Taemin, llevándose una mano a los labios.

Se metieron en el coche. Muy poco de conversación se habló durante el

corto trayecto hasta el restaurante. Lo que era a la vez una buena y una mala cosa. Dejo a Minho a solas con sus pensamientos, pero lo único que podía pensar era en lo complicada que se estaba convirtiendo su vida y como él estaba cayendo duro por el hombre que estaba sentado a su lado.

Lo que confundía aún más a Minho. Toda su vida había hecho un punto de no permitirse a sí mismo acercarse a los demás, y mucho menos desarrollar sentimientos por ellos. Sin embargo, allí estaba él, replanteándose todo por un chico que apenas conocía. Por supuesto, él y Taemin se habían conocido hace un mes, pero no habían tenido una conversación real hasta hace poco.

Cuando por fin llegaron al restaurante, Minho dio un suspiro de alivio. Tal vez el cambio de escenario le daría a su mente un descanso. Así las cosas, su cabeza parecía que estaba a punto de explotar, y la cita no había comenzado todavía.

Aunque el beso había sido bueno, muy, muy bueno, lo hizo a Minho preguntarse si había más por venir. Ciertamente lo esperaba. Ahora que él había tenido el sabor de Taemin, estaba ansioso por más. Mucho más.