Un rayo de luz iluminó la cara de Freya quien despertó casi al instante. Sin embargo, eso no fue lo único que consiguió que saliera de la cama. Desde la planta de abajo se escuchaban las voces de una conversación entre su hermana y otra persona cuya voz se le hacía desconocida. Realmente no le apetecía bajar para comprobar con quién hablaba la rubia, pero su curiosidad la ganó y decidió ir no sin antes arreglarse un poco puesto que no sabía a quién podría encontrarse en la planta baja.
-Muchas gracias por todo señor-La voz de Venus cada vez se escuchaba más cerca-.
-Gracias a ti por todo lo que haces por nuestro mundo-Dijo aquel hombre misterioso-.
-Permitame acompañarlo a la puerta-Una sonrisa de cortesía adornaba su rostro a la vez que los dos se levantaban-.
Freya por fin llegó hacia el salón parando en seco, por la sorpresa, a su hermana y a aquel hombre. Este mismo parecía ser de la tercera edad y a juzgar por el gran tamaño de sus alas posiblemente formaba parte del Gran Consejo de los Ángeles.
-Señor Raziel, le presento a mi hermana menor, Freya-Venus la miró esperando a que esta respondiera-.
-Un placer conocerla señorita-Dijo adelantándose a la otra chica-Bueno, yo debería irme- Miró a la rubia en señal para que le acompañara hasta la puerta principal-.
-Gracias por la visita, hasta pronto-Cerró la puerta dedicándole una última sonrisa a su visita-.
Freya se encontraba estàtica persiguiendo con la mirada a aquel hombre hasta que salió. El echo de no haberle visto antes no la extrañó, sino el porqué se encontraba en su casa y hablando con su hermana segundos atrás.
-Venus-La llamó con la intención de saber la respuesta a su pregunta-.
-Era el señor Raziel-No hizo falta que su hermana preguntara puesto que Venus ya se imaginaba su confusión- Forma parte del Gran Consejo de los Ángeles-Hizo una pausa acompañada de un suspiro- Han cerrado el caso de mamá-Optó por la frialdad para no mostrar debilidad ante su hermana-.
-¿Qué?-Aquello la tomó por sorpresa, tanto que la tristeza se hizo presente en su mente-.
-Ya no hay nada más que puedan hacer, solo nos queda recordarla-Mantenía su tono serio a pesar de ver a su hermana a punto de desmoronarse-.
-¿Y no piensas hacer nada para impedirlo?-Comenzó a desesperarse-.
-Freya no empieces-Quiso decir algo más pero su hermana se le adelantó-.
-¿¡Qué no empiece a que!?-Su tono de voz se elevó-¿¡Es que acaso no te importa mamá!? ¡Ella merece justicia y tú vas a dejar que la olviden!-Su voz empezó a quebrarse-.
-Freya no, porfavor-Venus luchaba por no perder los estribos con su hermana para evitar otra discusión-No digas esas cosas porque a mi tambien me duele lo que pasó y me duele no poder hacer nada para hacerle justicia, pero me aguanto las lágrimas porque yo misma decidí no saber-.
-¡Que tú no quieras enfrentarte a la realidad no quiere decir que...-Su hermana la interrumpió-.
-¡Basta ya!-Por más que lo intentó, la insistencia de su hermana pudo con su paciencia-¡Si tanto quieres saberlo averigualo por ti misma, pero tu misma sabrás lo que haces!-Dicho esto se fué para evitar que Freya le devolviera la palabra-.
Una vez más, quedó completamente sola en medio del pasillo y con las làgrimas a flor de piel. Quiso evitar volver a sentirse así, por lo que decidió comer algo con tal de distraerse.
Durante el desayuno, por más que lo intentaba, no podía sacarse de la cabeza a su madre y todo lo que sucedió. Realmente no tenía tantos recuerdos con ella y es que era muy pequeña cuando, por alguna extraña razón la cual fue investigada, murió. El Gran Consejo se encargó del caso así como de autorizar que Venus se hiciera cargo de Freya, sin embargo, las escasas pistas por aquel misterioso suceso, provocaron el cierre de este. Varias teorías fueron formuladas, entre ellas la posibilidad de un asesinato causado por un demonio o un simple abandono. Freya se negaba a creer en ambas y por eso quiso investigar por su cuenta al recibir tan poco apoyo por parte del Consejo y su hermana.
ESTÁS LEYENDO
Cenizas de cristal
RandomDesde siempre ha estado establecida la rivalidad entre àngeles y demonios. Dos razas contrarias incapaces de convivir juntas debido a sus diferentes ideales. La perspectiva de los àngeles y su posición en contra de los otros seres era clara, no quer...