Con este regalo y esta carta no vengo a pedirte que seas mi novio, no vengo a pasar un pedazo de mi día o malgastar tu tiempo y ni mucho menos ilusionarte. Estoy aquí presente con mi corazón en mano que aún con grietas viene fuerte y lleno de orgullo a pedirte si puedo ser tu novia, si puedo ser ese hogar al que siempre tengas la puerta abierta y un enorme abrazo para ofrecer, si puedo ser esa mujer con la que despiertes cada mañana o pienses para desahogarte cuando te suceda algo tanto bueno como malo.
No necesito ser la más importante o la número 1 en tu vida pero me gustaría ser lo suficientemente importante como para que me elijas aún con mis más y mis menos, para crecer juntos, para resolver cuando todo se dificulte, aun cuando estés harto de mi sea yo la mujer que quieras tener agarrada de tu mano y aún deseando que después de leer esto me beses y empecemos está aventura ya planeada desde prácticamente que nos conocimos quiero que sepas que tienes todo tu derecho de irte, la puerta está abierta aunque no puedo prometerte dejarte ir fácilmente, si lo deseas está bien pero sé que mi corazón va a seguir eligiendote y luchandote y voy a intentar mejorar de mil formas y si aún así no lo consigo siempre voy a estar aquí para darte una mano, para ser tu hombro para llorar, para todo lo que me pidas.
Somos un equipo ya tengamos todo o nada porque te amo y la eternidad jamás dispondrá del tiempo suficiente de todo aquel que quiero pasar contigo viendo tus ojos brillar como lo hacen cada vez que se asoma ese amanecer disfrazado de tu sonrisa.
Con la respiración contenida y mis nervios a flor de piel termino esta carta que ojalá haya causado algún bonito sentimiento en tu corazón preguntándote ¿me harías la mujer más feliz siendo mi compañero de vida de aquí hasta el futuro más lejano posible,mi equipo,mi mejor amigo y sobretodo mi pareja con tu mero reflejo en el espejo o tú misma imagen de las fotos como mi único amante?
