Capitulo 8

206 24 30
                                    

2001

•••

16 de julio; 8:03 am, primaria.

Phoenix Wright no iba a tener un buen día, no ahora que debe correr porque sino llegará tarde a clases.

Corriendo por los pasillos de la primaria mientras trataba de recuperar el aliento, un niño de nueve años, de nombre Phoenix Wright, había olvidado poner la alarma, así que ahora corría para salvar su destino de un castigo.

Y entonces, Phoenix choca con un compañero, provocando que ambos caigan al suelo.

—¡Auch!—Exclama Phoenix con el impacto—Ay, mi trasero...

—¿Estás bien?—Pregunta el otro niño mientras se pone de pie y le ofrece una mano para levantarse—¿Por qué corres? No hay que correr en los pasillos.

—Ya sé pero es que estoy llegando tarde—Phoenix toma la mano del otro compañero así que por fin se pone de pie—¿Emm...? ¿Miles, verdad?

—Miles Edgeworth—Dice el niño con las manos en la cintura—¿Cómo no sabes mi nombre? Estamos en la misma clase.

—Soy malo con los nombres, apenas llegaste a mi clase.

—Vaya, yo me aprendí el nombre de todos los del salon.

—¡Pero si somos más de treinta!

—¿Eh?—Para Miles eso no suponía un problema.

—«Wow, es verdad lo que dicen...Miles es muy listo»—Entonces Phoenix vuelve a la realidad—¡O-Oye, vamos a llegar tarde a clases!

—Llegaremos a tiempo, tengo un reloj—Miles muestra su reloj de muñeca color magenta.

—Pero mi reloj dice...—Entonces Phoenix se percata del problema—No avanza...¡Lleva todo este rato sin funcionar!

—¿Lo ves? Llegaremos a tiempo, nunca he llegado tarde a clases, ni siquiera cuando estaba en el jardín de niños—Miles lo dice en un tono tan engreído que se puede notar a kilómetros.

—«Wow, es verdad lo que dicen...Miles es muy presumido».

Ambos caminan juntos al salón, creando un silencio incómodo, que aunque dura un par de minutos, se siente como horas. Miles no es muy hablador, y Phoenix es tímido, y mas con las personas que no conoce; asi que ahí los tenemos, un par de niños caminando como si fuera una tortura.

Y justo cuando iban a atravesar la puerta del salon, una tortura aún mayor aparece.

—¡Nick!—Exclama Larry Butz, también de nueve años—¡Nick, la Navidad llegó antes!

—¿En serio?—Expresa Phoenix ilusionado, ya que lleva desde marzo pidiendo el nuevo set de Hotwheels.

—¡Miriam me habló, y me dió su número, creo que ya estamos casados!

Phoenix, siendo el niño que es, por supuesto que le creyó. Si bien todos en el salón sabían perfectamente que Larry Butz no sólo es el alumno que es capaz de reprobar incluso si le dijeran las respuestas, sino que también un soñador. Teniendo para él solo toda la imaginación que Phoenix no tiene.

—¿Estás casado?—Pregunta Phoenix mientras muerde ligeramente la punta de su dedo pulgar; una costumbre que ha querido desaparecer desde niño.

—Pues obvio, no te mentiría ¿verdad?

En defensa de Larry, Phoenix le ha creído cosas más absurdas, ejemplo de ello cuando Larry expresó con ojos inocentes que había visto a Spiderman volar sobre su casa. O cuando aseguró que su abuelo había sido un pirata famoso, o que una vez peleó con un perro salvaje. Esa última fue cierta, y también la única historia que Phoenix nunca le creyó.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 18, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Lo nuestro en la ciudad [WrightWorth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora