DAYLIGHT | Lucas Blondel

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Digamos que mi miércoles iba para la mierda, después de replantearme las cosas 40 veces más, insegura de avanzar con Lucas y que me salga todo mal de nuevo, decidí llamarlo para invitarlo a cenar algo y poder preguntarle ahí si le gustaría ir conmigo el viernes al partido. Pero las cosas no salieron como yo pensaba, como es de esperarse.

-Hola cami, como estas?

-Hola gordo, bien vos?

-Bien bien medio ocupado pero decime

-Ay si obvio, queres venir a cenar hoy?

-Gorda perdón se me re complica hoy, vemos en la semana?

Le dije que no había problema porque entendía obviamente, hasta ahí todo bien, el problema empezó cuando apareció el idiota de Enzo.

número desconocido
te ha enviado un link
epaaa jugando a dos puntas el muerto ese che?

Abrí el link para encontrarme con una publicación de LAM donde mostraban fotos de Lucas con una rubia, preciosa, hoy, muy cariñosos.
Estupida. Estupida. Estupida.
Y el otro idiota quien mierda se creía para mandarme eso? Como si el fuera el gran ejemplo.
Lucas no me debía nada, yo no le debía nada, pero que estupida me sentía y si, quería llorar.
Pensé en buscar a Nicolas, pero sabía que iba a ser la excusa perfecta para que me insista en volver a Portugal y la verdad a estas alturas y con el desastre que tengo en la cabeza, supongo que aceptaría. Pero no.
Pensé un poco más y se me ocurrió alguien pero la verdad me parecía mejor idea llamar a mi hermano, bueno, que se deje de joder y sea mi amigo aunque sea un rato. Estaba llamando a Leandro.

-Cami? Todo bien?

-Podes venir a casa? Por favor

-Estas llorando boluda? Decime que pasó

-Podes o no lean?

-Obvio que si, en un rato llego

Sabía que estaban en el predio de Ezeiza por lo que seguramente iba a tardar, hasta estaba la posibilidad de que no lo dejaran salir, pero necesitaba a alguien.

Me quede dormida así que no cuanto tiempo pasó hasta que escuché el timbre. Le digo al encargado que lo deje pasar si era Leandro y el lo deja. Voy hasta mi puerta y lo espero recostada en esta, me miro un poco y me doy cuenta de que estaba casi en pelotas, pero bueno hacía calor, hago un amague de ir a cambiarme cuando lo veo saliendo del ascensor. Camina rápidamente hasta mi con el semblante serio, preocupado.

-Camila que pasó?

-Odio darte la razón, eso pasó.- le digo haciendo un puchero conteniendo mis ganas de llorar y bajo la cabeza

-Pero nena, dios, me preocupaste boluda, es por el boludo? Decime que no lo invitaste al partido del viernes por favor

-No, pero casi.- entramos y el cierra la puerta, de mi cabeza salió por completo que me tenía que cambiar.- que se yo, no somos nada, pero para que mierda me dice que le encanto y no se que más boludeces si después va a salir a los besos con una rubia después de rechazarme una cena diciéndome que estaba muy complicado.- diciéndolo en voz alta me daba bronca.- tenes razón al final boludo, todos vienen con pinta de buenitos y miralos

-Bue, la ligo yo también

-Sabes que no, lo nuestro fue diferente lean

-Se que no querías lastimar a nadie, lo entiendo también, pero te extraño todos los dias cami, tenerte ahí siempre, nuestros días juntos, tu olor