Terminé el trabajo al límite de la hora de entrega 10:56 para ser exacta... No logré recordar su nombre. Y el sentimiento de culpa me invadía.
Me acerqué al mostrador donde se encontraba hablando con otra chica muy posiblemente su novia ya que podía escuchar su risa y su cambio de humor cuando llegó mientras yo seguía terminando el proyecto.
- Gracias, por la computadora y una vez más una disculpa por lo de antes. - dije
- Tn está bien, no tienes porqué disculparte. - Había algo cada que decía mi nombre, algo que dentro de mi me hacía sentir culpable por no recordar el suyo.
- ¡Nos vemos! - Tomé mis libros y me dirigí a mis clases.
Intenté concentrarme en mis clases sin éxito. Era difícil para mí retener mi atención y constantemente terminaba pensando en el nombre del chico.
Hubo dos clases donde estuve con él pareciendo dos completos extraños, intenté prestar atención si el profesor decía su nombre pero no fue mencionado en ningún momento.
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Llegué a casa preparándome para ir a entrenar de noche, preferiría ir por la mañana pero dadas las circunstancias esta vez debía ir en la noche.
Llegué al gimnasio a las 8:00pm colocándome mis audífonos decidida a empezar con la rutina de hoy. Mi peor enemigo... cargar pesas.
Comencé a cargar la barra más larga que había disponible, llevaba un poco más de la mitad cuando mis brazos comenzaron a temblar perdiendo un poco el equilibro hasta que me incliné hacia atrás, estaba a punto de caerme de espalda cuando un brazo sujeto mi cuerpo y el otro la barra que estaba a punto de tirarme al suelo.
Era el, es imposible que era el.
