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Cuando vives día a día, no te detienes a pensar en lo frágil que es la vida

En lo poco o mucho que alcanzas a dar

En lo rotas que se pueden ver tus ilusiones
Simplemente no te detienes a pensarlo

Mucho menos si eres hechicero

Hasta que te encuentras con la primera muerte de uno de tus compañeros

Yu Haibara había muerto con tan solo 16 años y todos estaban desolados

Era un chico lo bastante energético y lleno de felicidad que su ausencia se sentía demasiado, sobre todo al ser casi obligados a seguir su día a día como si nada hubiera pasado

A seguir sus misiones como si no tuvieran ahora la mente en tener que sobrevivir

"es normal en el mundo de los hechiceros, debería comenzar a guardarlo en sus cabezas"

Jamás fueron los mismos desde esa muerte

—¿Dónde tienes la cabeza? — era la voz de Suguru despertándola de sus pensamientos

Ella lo miro — solo estaba imaginando cosas — intento sonreír— saldré un poco ¿está bien? — no espero respuesta y solo se dio la media vuelta

Suguru había notado desde hace días que la actitud de Rin era otra y aunque intentará ayudar o saber que pasaba no podía encontrar alguna forma de solucionarlo

Rin sentía un hueco en su estómago ¿tan fácil era perder la vida siendo hechicero? era lo que no dejaba de rondar su mente

Tenía miedo

No solo por ella, si no por los que quería, no podía evitar pensar que no solo sería Haibara
Podría ser su mejor amiga Shoko
Podría ser su amado Satoru
Podría ser su querido Suguru...

—Te ves terrible— otra voz volvió a sacarla de sus pensamientos, era Kento

—Tú también— lo miro, claramente el era el más afectado y no debía ser tan dura — lo siento mucho Kento

—No importa... — suspiro y se recargo en la pared — sinceramente es más doloroso seguir recibiendo condolencias

Rin se sentó a su lado, le haría compañía de manera silenciosa

—No dejo de pensar en salirme del mundo de la hechicería — el rubio estaba abriendo sus pensamientos hacia ella

—¿Quieres otra vida? ¿Eso es posible? — la pelinegra lo miro

—Cuando me gradué de esta preparatoria me iré a estudiar contaduría o negocios — suspiro — no quiero seguir soportando este tipo de vida — su voz estaba apagada— ¿Tu que harás superior?

Rin estaba asombrada por lo que Nanami le decía, jamás espero que él se llegase a abrir así con ella pero suponía que se debía a qué ya no tenía a nadie con quien hablarlo — no lo sé, desde niña se me enseñó a seguir el camino de la hechicería pero ahora... No creo que sea esto lo que quiero — ella también abrió su corazón

Se la pasaron hablando un poco más, Rin alentaba a Kento y Kento alentaba a Rin

Jamás se habían dado el tiempo de platicar profundamente entre ellos, solo hablaban ocasionalmente cuando salían con todo el grupo, pero esta vez era todo diferente

Prácticamente ese ocaso se convirtió en el testigo de una amistad sin igual

Rin cuido del corazón desilusionado de Kento
Y Kento cuido de los pensamientos pesimistas de Rin

Y una vez más, Suguru vio cómo es que no era él quien cuidaba de ella
Cómo poco a poco la azabache convivía más con el rubio

No la culpaba de nada, Kento no tenía el apoyo de nadie, solo tenía las condolencias y las miradas de lastima, pero en realidad nadie se acercaba a preguntarle si necesitaba algo, solo Rin

Still With You -Suguru GetoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora