Capitulo 23: Tocar y temblar

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-¡Estás pisándome!

-i¿Yo?! Tienes el pie demasiado pequeño, Sana.
Parecen dos tapas de botella

-Néstor o sabe agarrarme bien, esto es una perdida de tiempo

-Yo soy el que guía, Sana, no puedes moverte a tu antojo

-Freyder, eres malo bailando

-Eso es porque me toca con un chico con cara y voz de niña, porcelana. No fastidies

Valeria apretó los labios escuchando las quejas de sus alumnos; ese viernes, los había emparejado para comenzar con una clase de baile pero al parecer no congeniaban con la persona que tenían en frente y debía hacer algunos cambios, el tema era que no sabia cual y de que manera.

Movió la cabeza, los dejaría así, al fin y al cabo recién llevaban cinco minutos tomados de la mano y sin dar un paso correcto de baile. Podían mejorar con el correr de los días.

Antes de caminar otra vez hasta su equipo de música, le dio una rápida mirada a Yuri , la morena estaba sentada en un viejo sillón en forma de cubo al lado de Ken y susurraban cosas solo para ellos. Se preguntó qué, porque Yuri apenas entró dijo que ella no bailaría pegada a ninguno de los chicos y por eso prefería darle ideas a Ken mientras él escribía algo.

Puso la música nuevamente y todo salió igual.
Apenas juntaron los cuerpos, comenzaron los pisoteos, los gritos por el trabajo mal hecho y los reproches por culpar al otro en un paso mal dado.

Manteniendo la calma, se acercó al grupo de seis y se detuvo frente a ellos.

-No es muy difícil, solo los chicos guían y las chicas lo siguen. Sami lu ¿por qué te separas de Ramirito apenas comienza la música?

-iPorque vive pisándome! Uno de sus pies es como cuatro de Néstor o Freyder. No quiero seguir bailando con él.

-En mi defensa...

-No tienes defensa, García- lo cortó Valeria y el chico pateó algo inexistente del suelo - Néstor y Sana
¿cuál es su problema?

-No confió en él. No me sostiene bien y parece va a tirarme al suelo. Quiero a Freyder.

-Siempre, nena -murmuró Freyder alzándole las cejas y guiñándole un ojo- Yo también quiero cambiar. Robi  me toca mucho

-iNo es cierto! - se defendió Robin sonrojado porque el chico mentía y solo para molestarlo.

-Bueno, bueno... A ver, ven Freyder - lo llamó Valeria y el chico inmediatamente se puso frente a ella-
Guiarás y te seguiré ¿de acuerdo? - el chico asintió al momento que colocaba una mano en la cintura de Valeria y el otro brazo lo estiraba para unirlo con el de la rubia- Observen... eh, Yuri, pon la música -la llamó con diversión para que Yuri, además de hacerlo, la observara.

La morena alzó la vista al escuchar su nombre.
Entrecerró los ojos, Freyder y Valeria estaban demasiado pegados que parecían uno solo. Bufó algo por lo bajo y con lentitud hizo lo que la peli negra le dijo.

Cuarenta segundos. Cuarenta segundos exactos contó
Yuri desde un constado al ver a Valeria junto al cuerpo de su mejor amigo. Cuarenta segundos en que no se quitaron la mirada de encima y de vez en cuando Freyder le guiñaba un ojo.

Curvó sus labios hacia arriba y se cruzó de brazos, estaban brindando un espectáculo cual pareja enamorada y eso le generaba algo en el interior. Una sensación rara de molestia y nueva que golpeaba su pecho.

Cuando Freyder giró el cuerpo de la peli negra y terminó de pegar la espalda de ella contra su pecho, estiró su brazo y detuvo la música. Todos los pares de ojos fueron a parar en ella.

Lenguaje del amor-YuleriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora