Ctp. 3: Cercania

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Aún con el frío invernal y el cansancio corporal, un abrazo no estaría nada mal, aquellos cuerpos buscaban un calor ajeno, uno reconfortante y agradable, algo dulce sin lograr ser empalagoso, por más viva que la flama de la chimenea estuviera, un ...

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Aún con el frío invernal y el cansancio corporal, un abrazo no estaría nada mal, aquellos cuerpos buscaban un calor ajeno, uno reconfortante y agradable, algo dulce sin lograr ser empalagoso, por más viva que la flama de la chimenea estuviera, un calor adicional no los mataría.

Unos brazos sobre los hombros, rodeando el cuello, y los otros abrazando el torso, con las manos acariciando lentamente la espalda superior. Un sofá cómodo, una posición aún mejor, y los latidos de dos corazones unidos por un solo sentimiento.

La cabeza del de ojos oscuros y vacíos, se acurrucaba a paso lento en el hombro derecho del contrario, acaparando ese espacio, buscando aún más calor y sentir más al corazón.

—No te duermas, que yo no voy a cocinar ni cuidar la estufa. -Con un tono dormido y ronco, procedió a dar unas suaves palmadas en la espalda del otro, para que no cometiera dicho de quedarse dormido.

—Mmm, ¿Cómo no hacerlo?, estoy demasiado cómodo aquí, contigo... -El sonido de un reloj corto la conversación de ambos, chillando por atención.

Con disgusto y molestia, separándose del abrazo, Rich se dirigió a la cocina, dejando a Farfadox solo en aquella sala, apagando el fuego de la estufa y batiendo el líquido de la olla, sacó dos tazas de un gabinete, ambas con imágenes características, una pequeña rata y una capibara, sirviendo chocolate caliente en cada una.

Buscando entre gabinetes un plato pequeño y un paquete de galletas, vacío una parte en el platillo, llevándolo a la sala, colocándolo en la mesa de estar, regresando a la cocina por ambas tazas con el dulce líquido.

Dándole una taza a Farfadox, regreso a su lugar al lado de el, sin poder abrazarle o acurrucarse del todo, aún así se hizo de las suyas para poder estar lo más cerca posible, tomando un sorbo, sintiendo la dulzura en la lengua y el calor en el pecho, dándole la ligera sensación de familiaridad en su corazón.

Dejando la taza en la mesa baja frente a ellos, abrazo por costado el cuerpo del Farfano, sintiendo aquella sensación reconfortante y agradable de tener a alguien, repasando todos los momentos que habían pasado junto a él, una pequeña muestra de amor.

—Me sabes tan bien...

—¿Qué?

—Que me sabe muy bien, el chocolate.

Y con una mirada de "Se que me mientes", Farfadox solo le dio otro trago al chocolate, restándole importancia, tomo una galleta y se la metió a la boca, masticando pensante.

—¿No te sientes muy aburrido? -Pronunció palabra el de ojos blanquecinos, sacando de las nubes a Rich.

—¿Eh? -Un sonido de confusión fue pronunciado, dándole consigo una mirada de extrañez.

—Que si no estás aburrido, lo más probable es que la antena se allá ido a la poronga por la ventisca, así que televisión no hay. -Dijo mientras miraba la ventana cerrada del lado izquierdo.

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⏰ Última actualización: Oct 29 ⏰

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