"La sospecha"

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[...]

Los días de Konohagakure eran vida para muchos y hasta gran felicidad para otros tantos, pero, no siempre era así, en algunos casos, las personas tienen sospechas...

Y allí se encontraba, con la cabeza a punto de estallar, las piernas fallando, sus sentidos se iban mientras más pensaba en lo que tanto se había temido desde hace una semana.

Iwabee: Es imposible...¿nos cuidamos? ¡Maldición ya ni lo recuerdo!

Con las manos en la cabeza, se fue a su cocina a preparar un té para calmarse, estaba en casa solo y debía de pensar como le diría a su novio lo que estaba pasando, pero por ahora solo era una simple sospecha.

Iwabee: Tranquilízate Iwabee, no es muy posible...digo, no eres regular con estas cosas y además siempre te cuidas..y hasta le avientas el condon en la cara a Kawaki cuando lo hacen..

Tomo el té que preparo lentamente, mientras sentía como quería morir en ese instante, pero de nuevo regreso ese síntoma, vómitos, fue corriendo al baño para soltar todo y de nuevo sentirse terriblemente mal.

Iwabee: ...¡Necesito respuestas! Pero si voy a un médico...de inmediato van a advertir a mis padres...¿qué hago?

Mientras se lavaba la boca para deshacerse de cada rastro de vomito, se preguntaba que haría, no podía ir a una farmacia porque lo iban a reconocer y menos ir al hospital.

Iwabee: ...Tengo que hacer algo para que se aclare mi mente de una vez...

Con nervios y más que nada miedo, agarró su teléfono celular y marcó el número de Sarada, sabia que su madre estaba de día libre y aunque fuera un riesgo, le pediría una consulta ese mismo día.

Iwabee: ¿Sarada?

Sarada: ¿Qué pasa Iwabee? Es extraño en ti hablar por llamada.

Iwabee: Eso no importa ahora, por favor por lo que más quieras dame una consulta con tú madre hoy...necesito algo urgente.

Sarada: ¿Para qué quieres a mi madre? Ve al hospital idiota.

Iwabee: ¡Es una emergencia! Te lo cuento cuando este allá, pero por favor hazlo.

Sarada: ¡Bien! Esta es la última vez...¿le digo a Kawaki también?

Iwabee: ¡No! No puede enterarse...solo dile a tú madre, ya voy para haya.

Sarada: Más te vale explicarme que pasa.

Iwabee: Si lo haré, gracias.

Al colgar la llamada se preparo rápido para la consulta, se quito la chaqueta que llevaba ya que hacía calor y se dejo el cabello suelto.

Fue corriendo a la casa de los Uchiha-Haruno para lo que tanto ansiaba, tenía miedo, mucho, pero si resultaba ser cierto todo, iba a matar a Kawaki eso era un hecho.

[...]

Toco la puerta tres veces seguidas y fue abierta por nada más y nada menos que Sasuke Uchiha, quien llegaba de una misión a descansar a su casa. Al ver a el gran Emo Uchiha, Iwabee se sintió intimidado y casi huye del lugar, pero Sarada lo vio y lo hizo entrar, haciendo que su padre estuviera confundido.

Sasuke: ¿Qué hace él aquí Sarada?

Sarada: Es Iwabee papá, viene a consulta con mamá.

Embarazo AdolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora