Capítulo Cinco

599 33 9
                                    

⚽️

Huele tan bien, había olvidado que estaba en una casa por fin.

Me duelen todos los músculos, y hoy tengo la prueba con el equipo de aquí, quiero arrancarme los pelos de a uno.

Escucho unos tarareos venir de la cocina, ya me imagino quien está ahí, lo que no me imaginaba para nada era la postal que me iba a encontrar porque al entrar la veo de espaldas con un short diminuto y un sostén, que ni siquiera es deportivo.

Acto seguido me cubrí los ojos con mis manos.

A ver, la vista era increíble tengo que reconocerlo, pero apenas la conozco.

Carraspee porque no había notado mi presencia, y ella enseguida se dio la vuelta

- Hola, ¿por qué te tapas los ojos?- ella natural, como si no estuviera medio desnuda.

- Hola, y será porque estás casi-

- ¿casi desnuda? Quítate las manos de los ojos, como si no fuera algo que no hayas visto antes, y no me refiero a especialmente a ti misma.-

Como yo soy muy obediente, le hice caso.

- Parece que te gustan las costillas-

Primero la miré a ella, y en cuanto hice eso encarnó una ceja y me dijo:

- Mira la olla-

Y, efectivamente había eso ahí.

- Sí, me gustan bastante-

- Se nota, y de todo tipo.-

Antes que le pudiera contestar me pasó unos platos, y me dijo que vaya a poner la mesa para comer.

Mientras comíamos me dijo que iba a tener la tarde ocupada en el apartamento, porque había llamado a Marco, en ese momento capte que era para que no los molestara.

- No te preocupes, me voy a ir a probar. A el club de fútbol, volveré tarde. -

(SALTO DE CINCO HORAS)

Iba a tocar la puerta, pero escuché sonidos al interior y preferí dar una vuelta, la verdad es que me estaba obligando a mi misma a caminar. A este punto solo me quería ir a la cama, porque no aguantaba ni mis piernas.

Cuando volví, ahora había música.

mi mente dijo "que wea, velada a la luz de las velas o como es posible que tarden tanto"

Y, es que ya eran las una de la mañana, así que la llamé.

No contesto, y la llame, y no contestó, y así como por dos minutos, hasta que seguramente se hartó y habrio la puerta.

Tenía una cara de culo monumental, pero la mía era el doble y quería dormir.

Estaba en bata, y vi como salía su amigo vestido desaliñado.

"Dios, que gusto de mierda tiene"

Cuando entré, había solo silencio hasta que cerró la puerta

- Que lindo tú concierto- si lo decía por llamarla, estábamos mal.

- El tuyo también era muy bonito-

Su cara se desconfiguro al instante.

- Mira, no es por ser pesada, pero to te avise que iba a estar ocupada-

- Ocupada, ¿ocupada hasta las una de la mañana?-

Se le apretaba la mandíbula cada vez más.

-Oye, yo creo que a ti no te importa cuanto demoro en hacer mis asuntos-

- No me importa ninguno de tus asuntos, y tampoco cuanto tardes en ello. YO solo te pido que seas consciente que ya no vives sola-

- Ya, si no tienes nada que decir, me voy a dormir. Chao-

- Chao-

Lo que me faltaba, ahora voy a darme más vueltas que la chucha en la cama pq no puedo dormir.

Nada que una ducha fría no arregle.

Tan pronto salí, estaba ella afuera y yo solo con un top deportivo y un pijama de pantalón largo.

Note su mirada recorrer sin pudor cada esquina de mi cuerpo.

- ¿se te perdió algo? Porque, yo seguro que no lo tengo en la piel.

Se despertó, y entró.

Una cabezada encima de la almohada y ya me estaba despertando.

Parece que no hubiera dormido nada.

Me pareció una buena idea vengarme por lo de ayer, ya que no obtuve ninguna disculpa, ni palabra de parte de mi compañera de departamento.

Así que con un simple

- Ahora estaré ocupada yo en la tarde-

Y ella solo respondió con asentimiento de cabeza.

Verás ahora Capelli, lo penca que es.

(Horas después)

Aparte de lo que estaba ocurriendo había una sonrisa en mi cara al saber que eran las una y media, y ya había llamado una tres veces.

Le voy a dar hasta las tres para que esté contentita.

Pero, ante todo pronóstico escucho como se abre la puerta principal, y decido acabar con lo empezado.

Dieron las dos y media, para echar a mi acompañante bien conocida por ella, sí, su compañera de academia.

Sorpresivamente no se escuchaba a nadie, hasta que llegué a mi habitación y vi la misma Afrodita encima de mi cama, con la vestimenta del otro día, donde me tape los ojos, cosa que no fue así en esta ocasión.

- Parece que te la pasaste bien-

- Sí, por eso quería que no estuvieras por la tarde-

-Da igual, también escuchaste mi "concierto", ¿no?- Ella se paró de mi cama, y me agarra la cara con una mano- Sólo asegúrate que cuando te quieras vengar de tener las llaves de la casa, eres muy principiante en esto-

Piensa en la Biblia.

Para devolverle la mano, solo la agarre de la muñeca con la que me tomó la cara, y le dije:

- No te hagas la contenta ahora, tú ceño fruncido no engaña a nadie-

- Y, capelli, soy super principiante-











Gracias a la javi hay cap hoy, VOTEN CONSTANZA AL 3331 Y HAGO MAS CAP, ahora faltan tres 🥸.

El gusto de verte.   | vico ghDonde viven las historias. Descúbrelo ahora