| Previsto | Ghost y Tu

Chapter. 7

"Hay un GPS en el auto, podemos usarlo para saber adónde ir. Estoy bastante seguro de que también hay algo utilizable en el maletero, así que lo revisaremos una vez que la tormenta amaine", explicó Ross. Se sentó frente a ti con las piernas cruzadas.

"Si hay un GPS en él, eso significa que estamos siendo rastreados. Probablemente vendrán aquí tan pronto como la tormenta amaine, así que será mejor que salgamos de aquí. Sin el auto..." pones una mano en tu sien mientras la frotabas. Esta era una situación difícil en la que estar.

"¿Cómo? Ya viste cómo está afuera. No aguantaremos ni un día con ese clima". Noah suspiró mientras miraba a Ross, quien simplemente se encogió de hombros.

"Entonces voy a revisar el auto. Vamos Ross, vámonos", declaró Layla mientras se levantaba, agarrando el brazo de Ross e intentando arrastrarlo con ella. Él se levantó de mala gana y fue con ella. Ahora solo estaban tú, Emma y Noah.

"Esto es así... No sé ustedes, pero a veces siento que me he vuelto loco y todo esto es solo mi mente jugándome una mala pasada", confesó Noah mientras se recostaba, dejando que su espalda golpeara el suelo con un ruido sordo mientras miraba el techo.

"Honestamente, si no los hubiera conocido, también lo habría pensado. Pero no estamos solos, así que esto tiene que ser real. A pesar de lo extraño que es", admitió Emma mientras miraba entre tú y Noah. Agachaste la cabeza, tenían razón. Si por algún milagro logras regresar a tu universo original, ¿cómo vas a afrontar todo lo que pasaste aquí? ¿Quién te va a creer?

"Vamos... No pensemos en eso ahora. Estamos cansados y hambrientos. Esperemos hasta que estemos en un buen espacio  para poder pensar en todo adecuadamente, ¿sí?" Dijiste mientras ambos te miraban. Noah cerró los ojos después de eso y dejó escapar un profundo suspiro. Mantuvo los ojos cerrados, por lo que asumiste que iba a tomar una siesta. Emma no dijo nada, simplemente se quedó sentada, pérdida en sus pensamientos mientras se mordía las uñas.

Cerraste los ojos también, dejándote perder en tus pensamientos. ¿Qué pasó con Simón? Él estaba allí cuando te teletransportaron aquí. ¿Se olvidó de ti? ¿O se culpa a sí mismo por dejarte revisar tu teléfono? ¿Les contó a los demás lo que pasó? Sentiste un dolor al pensar que él te olvidaría. Al pensar que todos te olvidarán. Todo esto hizo que pareciera que tu existencia no valía una mierda.

Sentiste una mano en tu hombro y abriste los ojos para mirar al dueño de la mano. Emma te miró preocupada, sacó un pañuelo de su bolsillo y te lo dio.

"¿Estás bien?" susurró mientras te daba unas palmaditas en la espalda. Tomaste el pañuelo con gratitud y te limpiaste las lágrimas mientras asentías.

"Sí. Estaba pensando en todo". Exhalaste. Emma abrió la boca para responder, pero Ross la interrumpió y Layla finalmente regresó, con las manos llenas de objetos aleatorios que supusiste sacaron del baúl.

"Les tomó bastante tiempo. ¿Cómo les fue?" Emma le preguntó a la pareja mientras ponían las cosas en el suelo.

"Hay una ciudad a 2 kilómetros de aquí. Creo que podemos llegar a pie. Encontramos algo de dinero en la guantera y algunas otras cosas en el maletero, así que tomen lo que crean conveniente. Según el pronóstico del tiempo en el auto, la tormenta durará otros 3 días" Ross resumió su pequeño viaje mientras comenzaba a revisar los artículos que recogieron del baúl.

Era una mezcla de ropa, armas y otras cosas. Sin embargo, no había comida, pero eso era comprensible. Agarraste una mochila y una chaqueta. Nada en tu atuendo combinaba, parecías un arcoiris andante. Pero no te importó, no es que los demás se vieran mejor y esto era todo lo que tenían en este momento.

"No podemos quedarnos aquí por tres días. Nos moriremos de hambre", finalmente dijiste, y Ross asintió.

"Lo sé. Miremos a nuestro alrededor, tal vez haya una alcantarilla subterránea conectada a la ciudad. Podemos usarlas en lugar de caminar en la nieve", cerraste los ojos ante la idea de viajar a través de las alcantarillas. No sólo se verían como una mierda, sino que también olerían así.

"Ugh. Sí. Está bien, es mejor que morir congelado, eso es seguro", te levantaste de tu lugar y asentíste con la cabeza hacia una de las puertas.

"Revisaré esa área y te haré saber si encuentro algo", Ross asintió mientras te dabas la vuelta y te dirigías hacia la puerta. Era la misma habitación en la que buscaste antes con Noah. Había que mirar muy de cerca para ver el suelo, así de polvoriento estaba. Todavía era de día, así que no necesitabas linternas, aunque para empezar no las tenías

Cuanto más mirabas a tu alrededor, más te dabas cuenta de lo jodida que es tu situación. No podías evitar los pensamientos negativos mientras continuabas buscando cualquier cosa que pareciera una alcantarilla.

"¡HAY UNA AQUÍ!" escuchaste la voz de Layla hacer eco a través del edificio mientras gritaba. Dejaste escapar un suspiro de alivió mientras te dirigías hacia donde ella estaba. El resto del equipo ya estaba allí cuando finalmente la alcanzaste. Todos ellos mirando hacia la alcantarilla ahora abierta.

Ross apuntó con la única linterna que tenía a la alcantarilla para ver si era seguro dentro.

"Parece estar seco... ¿Quieren ir ahora o más tarde?" preguntó mientras miraba a cada uno de ustedes.

"Probablemente deberíamos ponernos en marcha. No sabemos cuándo podrían venir a buscarnos y tenemos que decidír que hacer ahora lo más rápido posible". Dijo Emma mientras comenzaba a bajar por la alcantarilla. Le quitó la linterna a Ross mientras miraba alrededor de la alcantarilla subterránea.

"¡Vamos! Es seguro", miró al equipo mientras uno por uno descendían a la alcantarilla. Ross fue el último para cerrar la alcantarilla detrás de él, y ahora la única fuente de luz era la linterna en la mano de Emma.

"Manténganse en guardia. No sabemos qué podría aparecer, pero por favor, por el amor de Dios, no disparen a ratas y cucarachas. Las estoy mirando, señoritas", Ross miró a las tres de reojo mientras camina adelante. Emma se burló de él antes de susurrar en voz baja

"Claro... Esperemos que no hagas eso."

Ross de hecho, hizo precisamente eso.