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En los ojos de Tang Ruoyao, aparecía el perfil lateral de Qin Yinong acercándose lentamente, con cejas y ojos esbeltos, brillando bajo la cálida luz amarilla, exudando elegancia y ternura.

Sus pestañas cayeron como alas de cigarra, y Tang Ruoyao cerró suavemente los ojos, dócilmente.

Qin Yinong bajó la cabeza, sus finos labios presionaron ligeramente el labio superior de la joven, emitiendo un toque de frescor que recordaba a la fragancia que emanaba de su cuerpo. Su presencia era tan apasionada y, sin embargo, sus labios se sentían ligeramente fríos.

El simple contacto de sus labios hizo que Tang Ruoyao dejara escapar un suspiro de satisfacción.

La última vez que se besaron fue antes de que Qin Yinong se fuera al extranjero a rodar una película. En los últimos dos años, Qin Yinong se había ido centrando en proyectos internacionales y a menudo pasaba varios meses en el extranjero sin regresar al país. Tang Ruoyao la echaba mucho de menos, pero no se atrevía a decírselo. Revelar su relación sólo aumentaría las dificultades a las que se enfrentaban.

Qin Yinong le tocó ligeramente los labios y luego se apartó ligeramente, como una libélula que rozara la superficie del agua, y Tang Ruoyao abrió lentamente los ojos.

"¿Qué ocurre?" Su mirada era clara, su tono tranquilo, ocultando expertamente la fugaz sensación de decepción.

"Nada." Qin Yinong la miró a los ojos tranquilos, apenas detectando el sutil aleteo en su corazón. Sus dotes interpretativas eran cada vez más exquisitas. Los ojos de Qin Yinong se curvaron ligeramente, sintiendo una sensación de satisfacción.

"Se suponía que tenía que llegar en el vuelo de ayer, pero surgió algo en el último minuto, así que no pude asistir a la entrega de premios". Qin Yinong puso suavemente sus manos sobre los hombros de Tang Ruoyao, mirándola seriamente a los ojos mientras le explicaba con ternura.

Pero al fin y al cabo, todavía era demasiado joven, incapaz de ocultar sus emociones. Al ser consolada por unas dulces palabras de una mujer, su corazón se sintió bloqueado, lleno de resentimiento y agravios.

Tang Ruoyao se quedó en silencio por un momento, evitando el contacto visual y con calma dijo: "No prometiste venir en primer lugar".

En marzo de este año, los Premios Laurel de Oro, uno de los tres galardones más importantes de la industria cinematográfica china, anunciaron sus nominados. Era la segunda vez que Tang Ruoyao optaba al premio a la Mejor Actriz, y esta vez confiaba en ganar. Quería que Qin Yinong estuviera entre el público para presenciarlo, e incluso se permitió la irreal fantasía de que Qin Yinong le entregara personalmente el premio, aunque en los últimos años había sido menos activa en la industria nacional.

Impulsada por sus ocultos pensamientos adolescentes, Tang Ruoyao había estado dando vueltas en la cama toda la noche. Por primera vez en tres años, Tang Ruoyao se armó de valor y le habló a Qin Yinong de este asunto, aunque en ese momento estaba rodando una película en Francia. No le pidió explícitamente que volviera, pero Qin Yinong lo entendió. Primero felicitó a Tang Ruoyao y le deseó éxito al ganar el premio, y luego le explicó, disculpándose, que tenía que ser presentadora en el Festival de Cannes y que sólo podría volver después de la ceremonia de clausura.

La ceremonia de clausura de Cannes tuvo lugar dos días antes de la entrega del Laurel de Oro, por lo que Qin Yinong dispuso de tiempo suficiente.

Sin embargo, Tang Ruoyao había esperado toda la noche anterior y Qin Yinong no había regresado, ni siquiera con un mensaje. Si le hubiera informado de antemano sobre su situación, aunque se sintiera incómoda, habría comprendido que Qin Yinong tenía asuntos más importantes que atender. ¿Qué significa ahora su explicación?

Fangsi [GL] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora