12

1.9K 223 10
                                    

S. P.

Es ese chico.

El mismo que hablaba con Max fuera de la escuela.

Aparentemente es hijo de mi futuro socio, maldita suerte. Se hablan con mucha confianza, más de la que me gustaría.

Me molesta porque viene conmigo, no con él.

— Oye, ¿Estás bien? Te quedaste callado —dice Fernando y volteo a verlo— ¿Seguro que ese chico es solo tu amigo? Pareces querer matar a mi sobrino con la mirada.

Me quedé callado un momento lo que le dio la razón, me di cuenta por como cambió su expresión.

— Oí que te divorciaste, supongo que es su reemplazo —se burla pero calla su risa al ver que no me hizo gracia— Lo siento, ¿Es en serio?

— Estoy saliendo con él, creo —confieso frustrado— La verdad es que no lo sé, es muy joven, tal vez solo quiera una relación abierta y no quiero parecer anticuado.

— Pues más te vale que dejes algo claro porque puede que él también esté confundido... ¿Es mayor de edad, cierto?

— Claro —respondí riendo— Tranquilo.

Asiente calmado y va por otro trago mientras me deja solo viendo como Carlos habla con Max.

No sé si es porque intento engañarme, pero no veo el mismo brillo que tiene como cuando habla conmigo.

No tiene las mismas expresiones, ni el mismo tono de voz.

Intento disimular mi disgusto probando un sorbo de mi bebida y busco con la mirada a Carlos Sr. para hablar con él de lo único que me importa para poder irnos.

Entre más tiempo esté con ese sujeto es peor para mí.

— Señor Perez, es bueno verlo —me saluda una mujer sacándome de mis pensamientos— No me volvió a llamar después de nuestra cena, que de hecho, fue interrumpida.

— Buenas noches señorita Carola —saludo incomodo— Sobre eso, de verdad lo siento, estoy muy apenado.

— No se preocupe que eso ya está en el pasado, ¿Cómo le ha ido?

— Bastante bien, gracias, ¿Y a usted?

— Igual, no he tenido ningún problema —responde sonriendo y toma mi corbata.

No me gusta para donde va esto.

— ¿Vienes con alguien?

— Sí —respondo rápidamente— De hecho sí, mejor voy a buscarlo.

— ¿Crees que se moleste mucho si te pierdes un rato? —pregunta y me recuerda mucho a nuestro anterior encuentro.

Un pedazo de pastel cayó en su vestido.

Está bien, ahora de verdad me recuerda al pasado, ¿No será un déjá vu?

Volteo para ver de dónde vino el proyectil y no me extraña que ya presentía esto.

— Ese mocoso de nuevo —acusa caminando lejos, creo que al baño.

Giro de nuevo para ver a Max, no dice nada, ni su amigo, es hasta que se da cuenta que lo observo que tiene una reacción, parece tener miedo.

— Disculpen —dije y fui hacia donde él, lo tomé de la mano y lo saqué del salón.

Pedí mi auto para irnos, subimos y empecé a andar.

Estaba celoso, de nuevo.

Max estaba celoso

— Yo, yo, perdón —tartamudea por fin intentando hablar— Señor Perez, yo le prometí que no volvería a pasar y, lo siento, no sé qué me pasó.

𝐬𝐫. 𝐩𝐞𝐫𝐞𝐳Donde viven las historias. Descúbrelo ahora