Una simple historia de un grupo de mercenarios en Cybertron en busca de cumplir una deuda, pero las cosas no saldrán tan simples.
¿Lograrán completar la misión o morirán en el camino?
--¡He aquí Uraya! La ciudad más hermosa del hemisferio sur de Cybertron. ¡Vaya nido de scraplets y oxidada miseria!-- grita Dragshot con desagrado, a lo que Slingwire le regañaría --¡Silencio! Hay que ser discretos...-- ¿pero para que? Ahora mismo se dirigen a una ciudad donde lo más importante está en su centro, dónde los edificios tocan el cielo; ellos, por el otro lado, están bordeando la ciudad en las grietas que antaño transportaban energon a la misma, lugar conocido por albergar carroñeros e inadaptados hasta el punto que las pocas autoridades ya ni se preocupan.
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La misión se vuelve una locura tomando en cuenta los recursos de los que disponen, o eso es lo que piensa Crossbullet, pues tanto Starline como Dragshot y Slingwire se encuentran tranquilos y estos últimos hasta hacen bromas en las que tratan de involucrar a Starline sin tanto éxito, tenían experiencia trabajando juntos, pero él no sabía en qué podría aportar, pues era decente en lo que hacía, pero pasar de robar en pequeñas propiedades a directamente secuestrar una nave carguera es un salto demasiado grande, exagerado, pensaba para si mismo,--Es aquí-- escucharía de Starline, pues ya habían pasado lo que era la muralla de la ciudad, ahora debían escalar para salir de la grieta.
Estuvieron un buen rato preparandose para empezar a escalar, pero sería Starline quien tomaría la iniciativa usando tanto sus cuchillas como las ruedas de su modo alterno, le seguiría Dragshot, confíado en su fuerza y en su hacha, --No mueras ahora-- le diría Slingwire a Cross, para levantar su brazo y disparar un gancho, verificaría si el cable está firme y empezaría a escalar.
Cross quedaría un rato viendo a sus compañeros subir ante una altura que parecía inalcanzable desde esa perspectiva, luego miró su brazo izquierdo, su antebrazo y despliegó un arma que le dieron antes de salir a la misión, un cuchillo de combate que está unido a su brazo pero puede ser removida y blandita como un cuchillo más, sería está herramienta la que usaría, clavando la hoja en la pared para después impulsarse y empezar a subir.
Al principio costaría pero no tardaría en encontrar el truco y subir más rápido.
A mitad del trayecto, Cross resbalaría y al tratar desesperadamente de aferrarse a algo, se sujetaría de una rara estructura, algo no tan firme, pues no era parte natural de Cybertron ni algo de la misma ciudad, al notar mejor lo que era, Cross se soltó y Slingwire, quien ya había subido, lanzaría uno de sus cables a él antes de caer, Cross se lograría aferrar al cable aún paralizado por lo que vió.
