La Solaris era una nave carguera cuya existencia era confidencial con un propósito en específico, ser la encargada del transporte e investigación de elementos del interés para Sentinel Prime. Hace unos cuantos ciclos estelares, la Solaris informó de un descubrimiento único el cual llevarían a Cybertron, pero de alguna forma la información se filtró a un grupo criminal y la comunicación con la Solaris se perdió.
Hace unos minutos la Solaris entro a la órbita de Cybertron, sin comunicación y sin seguir los protocolos de aterrizaje, siendo claro el secuestro. Si no hay señales de comunicación de de la Solaris en 24 minutos, 3 escuadrones de aerealbots que salieron en busca de la nave se encargarán de derribarla.
Dentro de la Solaris ya no hay ningún ruido que recorra los pasillos, solo los cuerpos de la tripulación se pueden ver, y una escotilla semi destruida en uno de los puertos de conexión. Una nave pequeña en dónde el grupo de mercenarios llegó en primer lugar.
Cross estaría sentado en el suelo ajustando un holograma con una cuenta regresiva en su muñeca.
Habría arrastrado dentro de la Nova-3 los cuerpos de Dragshot y Starline, a los cuales veía preguntándose como todo había terminado así. Tras unos segundos se puso de pie y tomando la radio de Slingwire, decide encenderla y escuchar la misma canción que escucho con el aquella noche en el Valkyria.
Dentro de los pasillos, un mercenario solitario iría en dirección del cargamento decidido a completar lo que Dragshot le había pedido, evitar que alguien se haga con esa arma.
En medio del recorrido ve por las ventanas la última cápsula de escape en dirección al planeta, una visión más adelante le confirma sus sospechas. Viendo unas cadenas y unas esposas de estasis en el suelo, Cross solo susurra un nombre –Sandheap...–, pero debe ignorarlo, su objetivo real está más adelante, la bodega de carga.
Crossbullet entra con su espada en mano preparado para cualquier sorpresa, pero en lugar de un combate, en medio de la sala encuentra a un decepticon más grande que Skygrid, y Cross logra inferir que se trata del "líder" que mencionó Sidedraft, Firewing.
Firewing nota la presencia de Cross y el como este mira con cierto nerviosismo a los alrededores, a lo que el decepticon le empieza a hablar de forma calmada y de cierta forma "amigable".
–Si te preocupa Skygrid, ella evacuó el carguero hace unos minutos. Solo estamos tu y yo ahora mismo, y pronto quedarás solo tú– diría Firewing mientras usa un escáner en la cosechadora de Soles.
–¿Cómo descubrieron esto?– preguntaría Cross mientras se acerca al decepticons.
–¿Como lo hiciste tú? Este carguero está diseñado para aguantar cualquier tipo de abordaje externo o intento de atraco, la única forma de burlarlo era usando la nave de reparaciones designada en Cybertron, así que envié la información de este pequeño juguete a Cacciatore... Luego llegaron ustedes y nos facilitaron el trabajo. Realmente me impresiona el que ese inestable bot haya sido capaz de traerlos hasta aquí, no fue tan difícil el convencerlo de lanzar esta nave hacia Cybertron– respondería Firewing mientras terminaba de escanear la máquina –Con los planos de esta arma no habrá problema en reconstruirla para que los decepticons nos podamos recomponer para volver a Cybertron. En cuanto a la máquina de aquí, cuando la Solaris se estrelle, el núcleo de la Cosechadora explotará liberando una gran honda de choque que absorberá todo rastro de energon en un radio enorme y liberando la energía en una gran explosión, eliminando toda forma de vida presente. Dejando una ventana abierta para retomar nuestro planeta–
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Transformers: PhantomHawk (Pt.1)
AdventureUna simple historia de un grupo de mercenarios en Cybertron en busca de cumplir una deuda, pero las cosas no saldrán tan simples. ¿Lograrán completar la misión o morirán en el camino?