Desde los 12 años pase de dueño a dueño, siendo una escalava, una sirviente, una hija, una pescadora, ladrona... y la lista puede seguir, ahora estoy en un barco rumbo a la provincia otomana ni siquiera pelie cuando me robaron simplemente acepte mi...
Cuando Aysun se fue al campo de batalla sus damas decidieron entrenar pues se dieron cuenta que estar a lado de su señora significa que debes ser fuerte, inteligente o influyente y en las ultimas dos no destacaban pero podían ser fuertes, así que entrenaron día y noche para sentirse capaces de permanecer a lado de su señora.
Fue triste todo lo que tuvo que vivir Aysun todo ese tiempo que estuvo en la guerra y es verdad no es para cualquiera, ella vio como hombres acaban destrozados luego de las grotescas escenas que presenciaban, luego de ver o respirar el fuerte aroma de los órganos y olores de aquellos cadáveres.
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- yo... no puedo aceptar su propuesta apenas y lo conozco, no por ser un futuro rey significa que debo correr a sus brazos por ser lo mejor, mi padre. - apunte al Sultán. - me ha enseñado que soy lo mejor para cualquier persona por lo tanto ellos deben demostrar que estan aptos para estar a mi lado.- baje mi brazo e hice una reverencia para retirarme a mis aposentos.
Aysun se fue a sus aposentos algo confundida como los hombres pueden cambiar por una mujer, como tiene el poder de ser poderosa.
mientras que el príncipe se levanto emocionado, camino hacia el sultán y su padre.
- Sultán deseo que Aysun sea mi reina, ella es perfecta para ese cargo, si me la entrega podemos hacer mas trato con nuestro territorio y otros reinos.- su padre miro sorprendido a su hijo.
- Es una gran oferta príncipe Caspian pero Aysun no es una esclava y menos de mi prioridad hace mucho tiempo que es libre de ese cargo y aunque si quisiera se la obsequio no seria algo de mi, ella es como una hija para mi y mi esposa, así que esta vez usted tendrá que ganársela igual que a los demás que van detrás de ella.- sonrió divertido.
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- ¿los demás?- pregunto Fernando. - claro. no creerías que mi hija no tiene un sequito de hombres que desean que sea su esposa tanto por su belleza, poder y claro por ser cercana a la familia real.-
- así deba regarle un país para tenerla a mi lado sin faltarle respeto Sultán pero nunca había sentido tanta extasís y emocion por una mujer, ella es especial y única deseo que sea mi reina así como la madre de mis hijos..- dijo orgulloso.
su padre lo veía sin creerlo como tuvo que viajar al otro lado del mundo para conocer a la mujer correcta, claramente su hijo estaba loco pero que daba si la muchacha no es de sangre azul tiene demasiados puntos a su favor que la hace mejor que cualquier princesa mimada, pues a lo que el pensaba no cualquier chica seria fuerte para estar en la guerra.
- Bueno señores ya es muy tarde, seria preferido irnos a descansar mañana será otro día y esperemos que sea mejor que este.- hablo Hurrem. mientras le guiñaba el ojo a su esposo.
ambos hombres entendieron la indirecta de la sultana y se despidieron de ellos, ya cada quien en su cuarto se fueron a descansar.
