Poe Ganándose a la familia de su casi novio ~RanPoe~

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El comunicado de Dazai sobre que Ranpo tenía pareja tomo por sorpresa a algunos, aunque todos pensaban que tarde o temprano pasaría, esos dos eran demasiado cercanos como para ser "rivales" cómo decía el mayor.

Después de eso, todos acordaron mentalmente que le harían una visita al escritor, quien ahora estaba muy tranquilo viendo a su mascota. Aunque, ellos no eran los únicos.

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Yosano

No tenía nada que hacer, por lo que fue la primera en hablar con el estadounidense.

Al entrar a la sala de espera, se detuvo a mirar a Poe unos instantes, claro que este al sentir la mirada ajena se dió cuenta de ella.

- Yosano-san, hola ¿Cómo le va? - no recibió respuesta inmediata, Yosano seguía viendolo y no le gustaba, su mirada era como la mirada jugadora de Fukuzawa, tenía sentido, ella era su hija.

No tardó mucho tiempo para que Akiko se sentara frente a Poe y empezara a hablar.

- no hay tiempo de charlar, vamos directo al grano ¿Conoces la tortura de la Falanga? -

- ¿Eh?... ¡¿EH?! ¿De q-que habla? ¿P-por qué me pregunta eso? -

Una sonrisa macabra se formo en la cara de la doctora, se iba a divertir asustando a su futuro cuñado con todos los métodos de tortura que podía emplear en caso de que éste lastimara a su hermanito.

- bien, tengo al menos una hora libre para explicarte ¿Con cuál quieres empezar? Estan la sierra, el potro, la silla de interrogatorio, la doncella de hierro - la doctora siguió hablando, mientras Edgar se daba cuenta de que Fukuzawa no sería su único problema.

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Minōra

¿Cuánto había pasado? Quizás 40 o 50 minutos, Poe solo sabía que habían abordado a fondo unos 8 tipos de tortura, ya estaba cansado de escuchar tantas formas de matarlo lenta y dolorosamente en el caso hipotético de que dañará a Ranpo de cualquier forma, como si él fuera capaz de algo así.

Afortunadamente su salvación llegó en forma de oficial de policía, más específico, el oficial Minōra.

- disculpen, estoy buscando a Ranpo-kun, se supone que debía darnos unos documentos para un caso en el que trabajamos -

- Ranpo se encuentra ocupado ahora, pero se cuales son, espéreme unos minutos mientras los traigo - sin más, Akiko salió y Poe respiro aliviado al saber que ya no debería escuchar sobre motosierras, cuchillos, sillas con púas y otras cosas que prefiere no recordar.

- tu eres el sujeto que estaba con Ranpo-kun en el caso de la escritora Yokomiso ¿Verdad? Creo que te llamabas Poe-kun -

- ¡Oh! Si, soy yo, en esa ocasión no nos presentamos, un gusto Minōra-san - dijo tendiendole la mano al mayor.

- igualmente, Poe-kun - y con eso tomo la mano de el escritor para luego darle un jalón y que éste se acercara - escuchame bien porque no pienso repetirlo, puede que no me haya llevado bien con Ranpo-kun en un inicio, pero ahora es diferente, ese detective es muy importante para este mundo y no dudaré ni un segundo en usar todo el poder que tengo como policía para acabar contigo en caso de que le pase algo por tu culpa -

Poe trago en seco, eso sí le dió mucho miedo, la mirada del hombre demostraba que todo lo que decía era en serio.

- disculpe la demora, Minōra-san, aquí están los documentos -

¡Salvación otra vez!

- bien, gracias, salude a Ranpo-kun de mi parte. Recuerde lo que le dije Poe-kun, espero nunca lo olvide - lo último lo dijo con una voz demasiado fría, se despidió de Yosano y salió de la agencia.