La conversación con su padre lo hizo sentir un poco más tranquilo, tenía razón, no puede siempre controlar todas las cosas. Esa noche, había terminado de cenar junto a sus padres, en su habitación, mientras miraba una película, recibió un mensaje por parte de Ohm.
Pensó un poco antes de responder, no se había sentido antes tan nervioso, su vecino siempre le escribía, esta vez decidió llamarlo. Tenía ganas de escuchar su voz.
-Non, hola, ¿Cómo estás? - gritó al otro lado de la línea alargando el saludo.
- H-hola Pawat, estoy muy bien y ¿tú?
- Muy bien, ¿sabes? Empecé a trabajar medio tiempo en una pequeña heladería cercana a la universidad, estoy muy emocionado, ¡voy a poder comer helado de menta y chocolate todos los días!
Nanon lo escucha atentamente, puede imaginar su rostro irradiando felicidad y haciendo su "baile feliz" cuando algo le emociona. Conocer esos pequeños detalles, lo hicieron sonreír levemente.
- Felicidades grandote, solo trata de no espantar a los clientes.
-¡Eres un malo!
-Es cierto, eres muy peligroso.
-No lo soy...
-Si lo eres
-¡No!
-Si.
-Bueno, soy un poco torpe pero lo haré bien.
-Lo sé. Lo harás bien. Te iremos a visitar con Mark.
-¿En serio?- Preguntó emocionado, comenzó a hacer un ruidito que hizo reír a Nanon. Sabía que esto la había puesto mucho más feliz.
Hablaron un poco más, sobre cosas triviales, Ohm siempre con esa energía y su risa contagiosa, le cuenta cómo ha ido su semana con lujo de detalles , Nanon de igual forma, aunque hablaba mucho menos, le comentó que había hecho durante sus días de descanso, luego, cuando terminaron de hablar, Nanon se tiró sobre su cama, soltó un gran suspiro y sentía a su corazón latir con fuerza, se sentía diferente. Quería ya volver a su departamento. Quería verlo a él.
Después de mirar un poco sus redes sociales y responder los estúpidos comentarios que deja su mejor amigo en sus publicaciones, decidió dormir.
Llegó el fin de semana y Pawat con toda la mejor actitud, va a la heladería, se coloca su uniforme azul , peinó algo su cabello revuelto, y salió rumbo hacia su trabajo, con esa alegría que la caracteriza, deseando que este, como toda su semana, sea agradable.
Llega después de unos minutos de camino en bus, saluda a sus compañeros y enseguida se pone a trabajar, debe atender a los clientes, preparar los helados y cobrar los pedidos. Realmente para él esta es una gran oportunidad para ser más independiente, y tal vez, no tan torpe.
Son las 3 de la tarde y el sol está en su máximo esplendor, el lugar está casi lleno, las familias van a disfrutar con sus pequeños los deliciosos helados y Ohm con una amable sonrisa, toma los pedidos de las personas que llegan y prepara los helados.
Después de una oleada de gente, pudo limpiar un poco, aprovechando que de un momento a otro no llegaron más clientes, el lugar se había vaciado, apenas había una familia en una mesa y un par de amigas conversando en otra.
Al ser su primer trabajo en la gran ciudad, la hace sentir muy nervioso, pero él quiere demostrarse a sí mismo que puede hacer las cosas bien.
Pronto terminó su turno en la heladería, acomodó las sillas, limpió las mesas y por fin pudo ir a casa después de despedirse de sus compañeros. De camino se topó con algo que llamó su atención. Un peluche de gato color gris, estaba en una vitrina de un pequeño local. Apenas lo vio, no pudo evitar recordar a Nanon, era idéntico a él. Con sus ojos cerrados y una amplia sonrisa no se contuvo e ingresó al lugar.
- Buenas noches, joven, ¿en qué lo puedo ayudar? - dijo el encargado de la tienda.
-¡Hola!, si, ¿me ayuda por favor con ese gato que está ahí en la vitrina?- Preguntó con gran entusiasmo señalando con su dedo.
-¡Oh! El gato, claro que sí, ¿se lo va a regalar a su novia?- el encargado con una sonrisa preguntó y Pawat no pudo evitar sonrojarse.
-N-no... Es para un amigo- respondió con timidez. El hombre lo vio rojo como un tomate y le sonrió.
-Tiene un amigo muy afortunado.
Pawat pagó el peluche y volvió a su departamento, iba dando saltitos de felicidad por la compra realizada, posiblemente Non lo miraría con desagrado por tal ridiculez, pues es muy gruñón, pero ya se acostumbró, al final siempre termina aceptando todo lo que él de da.
Tomó el bus para llegar más rápido, ya el sol se había ocultado por completo, quería llegar, ducharse, comer algo y terminar un pequeño proyecto de la universidad.
Al ingresar al edificio, subió con cuidado las escaleras, ahora si se fija por donde camina, llegó, entró en su departamento, dejó la bolsa y el peluche en su sofá y directamente fue a tomar un baño.
Se pudo relajar mucho, pues había encendido una vela aromática de lavanda, pudo escuchar música, esta vez en volumen bajo, y se tomó su tiempo. Salió y se colocó su pijama, fue a la nevera mientras secaba su cabello con una toalla del Rey León, y preparó algo para comer. Después de revisar sus redes sociales por un momento se puso a terminar su proyecto.
Ohm, a diferencia de Nanon, no trasnocha, él prefiere tomarse las cosas con calma, terminó casi a las 11 de la noche. Calentó un poco de leche y se fue a la cama.
Una vez ahí envió un mensaje a su vecino gruñón.
Te extraño, ¿Cuándo regresas?
Bloqueó su teléfono y se acomodó un poco más bajo las sábanas. Hasta que recibió una respuesta que en el fondo anhelaba mucho.
"Ya estoy en camino, duerme. nos vemos mañana."
Pawat leyó el mensaje y sonrió antes de quedarse dormido.
Nanon por otro lado, que ya estaba de regreso a su departamento en taxi, después de toda esa semana de vacaciones, se sintió muy nervioso. ¿Cómo podrá ver ahora a Ohm, después de haber entendido por fin sus sentimientos?
Su corazón latió con fuerza, Pawat definitivamente lo estaba volviendo loco, había conquistado toda su mente y en el fondo sabía que había estaba perdido, Nanon se había enamorado de él.
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Un gran desastre - OhmNanon ♥
FanfictionOhm pondrá de cabeza el mundo gris de Nanon. ON ship - OhmNanon ♥ Única pareja. Boys love / BoyxBoy Soft / Fluff / Comedia romántica / Happy Ending ♥Adaptación del fic minimoni (BTS): pequeño GRAN desastre, de mi autoría. Habrá cambios significativ...