¡Dios Bendiga a Este Depresivo Con Una Explosión de Amor! (T/n x Megumin)

Capitulo #2: ¡Salvado por una hermosa Demonio Carmesi!

Recupero lentamente la conciencia, no fue tan malo, osea. Aunque dormi en el suelo mi suéter y camisa de leñador fueron un buen colchón. Aunque es algo raro no sentir el césped en mi rostro. "¿Donde estoy?". Acabo de despertar así que mi cerebro no debe estar funcionando al 100% así que abro los ojos y miro al cielo, por lo que veo ya es de madrugada y la luz del sol saliendo por los árboles golpea mi cara. Pero no puedo ver mucho más por culpa de la jaula improvisada, Me estiro y doy un bostezo "Espera....¡PERO QUE CARAJ-"

??? Pov:

Caminaba serena entre los árboles del bosque, donde los pájaros entonaban su melodía y las hojas danzaban en su descenso desde las ramas. Mi mente aún resonaba con el bullicio del escándalo que tuvo lugar en el mercado la noche anterior. "¿Quien será ese chico?", pensé.

"¡Fue asombroso observar cómo esquivó una alabarda sin que sus piernas mostraran signos de debilidad!", a pesar de las raspadas. Continuó corriendo sin cojear, "¡¡Una muestra impresionante de determinación que dejó una marca en mi memoria!!".

T/n: "¡¿PERO QUE CARAJOS?! ¡¡AYUDAAA!!

Un grito irrumpe en mis pensamientos y, sin dudar, me dirijo hacia su origen. Al llegar, me oculto tras un árbol y observo la escena: un chico encerrado en una jaula, rodeado por ocho duendes y un imponente golem de piedra. La sorpresa me invade al reconocerlo: "¡Es él, el chico asombroso de la alabarda!".

Parece estar en aprietos, y una idea toma forma en mi mente. Con determinación, decido intervenir. "¡Espera un minuto! ¡Te mostraré lo asombrosa que soy!", pienso mientras preparo mi magia. La intención es clara: ayudar al chico de la alabarda a liberarse y enfrentar juntos a los duendes. "¡Chico de la alabarda, Llego tu salvadora!", afirmo, lista para desplegar mis habilidades mágicas y cambiar el curso de esta situación. "Más oscuro que el negro, más sombrío que la oscuridad, combínense con mi carmesí intenso. Llegó la hora de despertar, desciendan hasta estas fronteras y aparezcan como una distorsión intangible-"

T/n Pov:

"¡ESPEREN!, ¡¡Sueltenme, se los ruego!!" No puedo hacer nada, me ataron de piernas y las manos. Me quitaron la espada "¡¿Por qué me esta pasando esto a mi?!" Mientras gritaba y pataleaba, visualizo a lo lejos lo a una niña con un bastón, lleva lo que parece una capa de color negro con amarillo por los bordes de esta, al igual que su ropa y su gorro de brujo lleva una cara parecida a la de un espantapájaros. "¡¿Esa niña que hace allí?!, un momento. ¿Donde he visto antes ese sombrero...?" En ese momento, el viento golpea mi rostro en forma de un remolino que empieza a rodear a esa niña extraña y parece que todo se oscurece alrededor de ella "Woah.." fueron las únicas palabras que salieron de mi boca al ver tal espectáculo, ahora mismo. Estrellas Platinadas aparecen y brillan alrededor de ella, al parecer tal poder mágico está dirigido al golem que está sujetando a unos 10 metros la cuerda que suspende la jaula en el aire conmigo adentro ya que una niebla oscura empieza a rodearlo. Su magia comenzó a formar unas runas alrededor del golem, se elevo y se convirtió en un espiral con la mismas runas.

¿?: Que una fuerza destructiva inunde mi torrente de poder, ¡una fuerza destructiva sin igual! ¡Envía toda la creación a su origen! ¡La humanidad no conoce otra técnica ofensiva más poderosa! ¡Es el ataque mágico definitivo!

"E-Esto va a doler, ¿verdad?" Preparo mi cuerpo para el impacto y adoptó la posición fetal de manera instintiva esperando lo peor.

"¡¡¡EKUROOSPROOOOOOSSIOON!!!"

Ella gritó mientras su magia desintegraba al golem y a cinco de los duendes que lo acompañaban. Podía escuchar la carne y los huesos de ellos ardiendo y crujiendo "¡¡Wouaaaaarghk!!". Aunque no fui golpeado por la explosión, la onda expansiva me lanzó hacia atrás, destruyendo la jaula improvisada con mi cuerpo. Salí despedido contra un árbol, pero el impacto fue amortiguado por el ahora cuerpo aplastado y descuartizado de un duende. "¡Ahgk!, ¡Qué asco, por todos los cielos!" Mi espalda dolía pero todavía sentía mis piernas que era lo importante, rápidamente me incorporo y dirijo mi atención a el ahora grupo reducido de duendes tratando de escapar. Un duende llevaba en las manos mi espada mientras trataba de huir al bosque "¡¡NO VAS A ESCAPAR BASTARDO!!".