¡Dios Bendiga a Este Depresivo Con Una Explosión de Amor! (T/n x Megumin)

Capítulo #21: "¡Dios Bendiga Estos Compañeros de Duchas!"

Kazuma: "¡Maldita sea! ¡Quiero hablar con quien esté a cargo! ¡Les voy a contar lo que pienso!"

"¿Por qué tuvimos que venir aquí...?"

Darkness: "Sí todos nos quejamos juntos, tendrá un efecto más poderoso."

En lugar de retirarnos a la posada después de nuestro fracaso en la cita, nos topamos con Kazuma y Darkness. Kazuma estaba tan furioso que nos arrastró hasta la Iglesia principal de Axis y quiso hablar con quien estuviera a cargo, cómo si de una anciana se tratara. Darkness, por otro lado, como cultista de Eris, fue tratada peor que la basura real. Ella lo disfruto, eso estoy seguro.

Al escuchar los gritos enfurecidos de Kazuma, una sacerdotisa del Eje vino a ver qué estaba pasando.

Sacerdotisa: "¡Oh, Dios mío! ¿Cuál es el problema? ¿Estás aquí para la conversión? ¿Un bautismo? ¿O... tal vez estás aquí... por mí?"

Kazuma: "¿P-Por ti?"

Megumin: "Es tan fácil." Miro decepcionada.

"Me sorprende que no haya cedido antes..." Y yo la seguí.

Kazuma: "¡Ustedes dos no tienen derecho a opinar!"

Sacerdotisa: "¡Ja, Ja, Ja! ¡Solo bromeaba! ¡No me tomes en serio, vamos!" Soltó una carcajada en el rostro de Kazuma.

Sacerdotisa: "Ah... Miren, nuestro sacerdote, Zesta-sama, en este momento está por ahí haciendo proselitismo..."

Eso es preocupante.

Sacerdotisa: "Así que lo siento, pero tendrán que volver en otro momento." Nos informa.

Kazuma: "Espera un momento. ¿Pasó por aquí un Arcipreste con cabello azul?" Preguntó.

Sacerdotisa: "Ah, sí. Actualmente se encuentra en el confesionario. Por cierto, la mujer con la que viniste aquí está siendo apedreada por niños." Añadió con una sonrisa inocente.

Kazuma salió corriendo para buscar a Darkness, una vez que vio como la golpeaban con piedras, dejándome a Megumin y a mí. Me preocupe una vez la vi tranquila y temblando mientras se apoyaba en la pared.

"Oye, ¿estás bien, Megumin? No es usual que estés tan callada..."

Al mirarla más de cerca, tenía un terror absoluto en su rostro, junto a unos ojos muertos mirando a la nada.

Megumin: "La cita... T/n... perdón..."

"Genial, rompieron a mi novia..."

Ahora que lo pienso, el fracaso de nuestra cita la tuvo que haber afectado, ¡Todo este maldito lugar la a afectado!

"Megumin, cariño... lo que sucedió en la cita no fue tu culpa..." Intenté consolarla, pero no tenía idea de cómo proceder.

Le di un pequeño abrazo mientras acariciaba su pelo, cosa que al parecer funcionó, porque dejó de temblar y sollozar.

Megumin: "Lo siento, T/n... Quería que todo fuera perfecto." Dijo en voz baja, aferrándose a mí.

"No tienes que disculparte por eso, Megumin. Hiciste lo mejor que pudiste. Además, fue una buena cita."

Megumin levantó la cabeza y me miró con ojos llenos de esperanza y duda. "¿L-Lo... lo dices en serio?"

Sonreí y asentí. "Sí, lo digo en serio. Pasear y hablar contigo siempre es suficiente para mí..."

A ella se le iluminaron los ojos y se levantó de repente, haciendo una de sus poses raras y hablando con un tono victorioso.

Megumin: "¡Sabía que te encantaría! ¡No hay nada que una maga del Clan Carmesí no pueda hacer para asegurar una cita perfecta!" Sí, volvió a la normalidad.