05. anamnesis

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La anamnesis viene del griego ἀνάμνησις, significado de "recordar" o "recolección", por tanto, es la acción de recordar o recuperar información pasada. Su significado en sí puede variar según el ámbito en el que se esté utilizando y, aunque sea mejor utilizada en la medicina y en la religión, para el campo filosófico se trata de la idea de que el conocimiento ya existe dentro del alma y para aprenderlo basta con recordar lo que ya sabemos. Para que la anamnesis sea concretada plenamente, es suficiente traer a la memoria eventos, detalles o recuerdos anteriores.

Desde que Minho partió, el único deseo que Hyunjin tuvo fue volver a verlo. Tan sólo cinco minutos. Tan sólo tres. O tan sólo un par de segundos. La partida de Lee había dolido de una manera completamente desmesurada, como jamás creyó que algo podría dolerle en la vida, tanto que ese dolor se volvió parte de su misma esencia y de su vida diaria.

El rostro de Minjin tiene algo incomprensible encima, algo para lo que Hyunjin no sabe como responder y, aunque le mira durante unos largos segundos, prefiere apartar la vista. De algún modo le aterra identificar aquellos rasgos similares a los de alguien más y saber con quien la concibió Lee. La incertidumbre y el misterio envuelven la situación, y mientras Hyunjin busca en su interior las palabras adecuadas, una sensación de nostalgia y anhelo le abruma, como haciéndole saber que aún tiene mucho que decir y cuestionar. La vida de Minho ha tomado un rumbo desconocido para él, y aunque están juntos en ese momento, una distancia invisible parece separarlos más de lo que Hyunjin habría imaginado en su viaje a esa nueva realidad. El rostro de Minho todavía no le dice nada, pero abre la boca para hablar nuevamente.

- Está por cumplir los dos años.

- ¿Puedo pasar al sanitario? - pide Hyunjin, buscando un motivo para alejarse momentáneamente de la situación, necesitando tiempo para asimilar todo lo que ha descubierto en ese encuentro inesperado y para reconocer que aquella dimensión no le ha traído nada bueno en realidad.

- Claro, al fondo a la derecha.

Hwang sale de aquella habitación y la cabeza le da mil vueltas, como si estuviese a punto de desfallecer en ese instante. El sanitario lo localiza con demasiada sencillez, probablemente por las vagas instrucciones de Minho. Por primera ocasión se pregunta si la pareja de Minho se encuentra en casa. Pero elige que no le importará en lo absoluto, al menos no en ese momento. El nerviosismo y la incertidumbre le embargan mientras busca privacidad en ese pequeño espacio y aprovecha para tomar un respiro profundo que le llena las narices. La revelación de la existencia de la hija de Minho lo ha dejado conmocionado, y su mente da vueltas tratando de procesar la situación que está viviendo. Las ganas de reclamarle al otro su poca empatía y su falta de respeto hacia su relación, lo envuelven en un ciclo que no cree terminar y que no terminará. Hyunjin se siente traicionado y como si Lee se hubiera olvidado por completo de él.

Hwang cierra la puerta detrás suyo de manera frenética y al encender el interruptor, se mira en el espejo. El espejo es enorme y se encuentra totalmente pulido, con un marco color blanco y sin huellas dactilares encima. El sanitario huele a miles de productos que lo han dejado reluciente. Minho siempre ha sido limpio en exceso y, aunque aquello alguna vez asustó al mismo Hyunjin, desearía poder ser él su pareja y acatar todas las ordenes que Lee le diese para cumplir cada una a la perfección y mantenerlo contento. Hay una alfombra absorbente que adorna el suelo de azulejo color caoba y Hyunjin imagina cómo los pies de Lee salen después de cada ducha para escurrir su humedad en ella.

El joven se inclina sobre el lavabo, abre el grifo y deja que el agua fría corra sobre sus manos. Con cuidado, llena sus palmas y lleva el agua a su rostro de una manera poco cuidadosa, como si su vida estuviese condicionada a aquel enjuague o como si con este resolviera todos sus pesares. Muchas gotas lo abandonan y se resbalan hasta irse. Siente la frescura del líquido sobre su piel caliente y cierra los ojos mientras los rastros húmedos resbalan por su frente y sus mejillas. Un suspiro de dolor sale de sus labios. Un dolor en su pecho, en todas sus extremidades y en el alma. Un dolor difícil de soportar, pero que aún en agonía, lo tolera.

BD +36 3317Donde viven las historias. Descúbrelo ahora