Reto. [HeeJake]

5.

Dos semanas habían concurrido y las interacciones entre Jake y Heeseung habían avanzado de solo un saludo y una despedida. En este poco tiempo Jake había descubierto varías cosas sobre Lee, debido a su gran curiosidad preguntaba en cada oportunidad que se presentaba sobre los gustos y cosas que le interesaban al otro. Heeseung no tuvo opción que dejarse hacer, al mismo tiempo que también aprovechaba para descubrir cosas sobre Jake que podrían servirle en un futuro.

A decir verdad, la perspectiva de Heeseung sobre Jake no había cambiado, seguía pensando que era alguien muy aferrado al estudio y a la lectura, era alguien muy aburrido.

Pero eso no lo detendría a lograr su cometido. Por el otro lado, Jake creía que Heeseung era alguien muy interesante, nunca tuvo amigos así que es normal que se emocionara al descubrir los gustos de una persona de su edad. Descubrió que Heeseung siempre ha sido alguien muy bueno en los deportes desde que era pequeño, que es alguien que viene de una familia de dinero a diferencia de él, que es muy social, aunque a decir verdad aquello ya se lo esperaba y también que le encanta el ramen.

Jake también ama el ramen, por eso mismo había invitado a Heeseung a salir un día que no esté ocupado e igual para aprovechar y conocerse un poco más, también para terminar el trabajo, obvio.

Ambos se encontraban en la clase de física, última para salir al segundo descanso que por lo general es más largo que el primero. Ese día toca entrenamiento para el equipo de fútbol y Heeseung había invitado a Jake a ver el entrenamiento.

Obviamente el castaño no desaprovechó esa oportunidad y accedió, así que al sonar el timbre para salir a descanso, él junto con sus dos nuevos amigos se encontraban camino al campo de fútbol.

-¿No les he dicho cuánto amo los entrenamientos?- comentó un muy emocionado Sunoo, amaba ver los entrenamientos a pesar de que no entendiera nada sobre fútbol, él solamente iba para poder ver a Sunghoon.

-Sí, como un millón de veces cada semana, y ya me tienes harto, solo vas para ver a Sunghoon, no porque te guste-. Comentó Riki con voz irritada, sinceramente el odiaba el fútbol pero aún así acompañaba a Sunoo para que no fuera solo.

-Corrección, amo ver como juega-. Sentenció el más bajo. -Y también amo verlo a él-. Agregó por último.

-No tienes arreglo de verdad-. Lo acusó Riki, no le gustaba que su querido amigo estuviera detrás de alguien que ni siquiera lo miraba, sentía que no valía la pena.

Luego de unos minutos caminando, por fin llegaron al campo de entrenamiento. Tomaron asiento hasta arriba en las gradas, para tener mejor vista.

Aunque no había demasiada gente, mayormente había chicas fanáticas de solo gritar el nombre de los integrantes del equipo y no para disfrutar el entrenamiento. Aunque él iba para casi lo mismo pero eso nadie sabía.

En medio del entrenamiento, Heeseung por algún motivo le dió un vistazo rápido a la gente que se encontraba en las gradas, realmente no esperaba que Jake en verdad fuera a verlo, pero ahí estaba.

Le dedico una pequeña sonrisa, sabia que lo estaba mirando así que supo que su sonrisa fue recibida. Luego de eso regresó toda su atención al entrenamiento.

Lo que no sabía es que había causado esta pequeña e insignificante sonrisa en Jake. Juró desmayarse cuando la recibió, un poco exagerado a decir verdad.

-Y dicen que el simp soy yo-. Sunoo rodó los ojos mientras veía a su amigo desfallecer de por una simple sonrisa.
Pero, admitiría que si estuviera en su lugar y Heeseung fuera Sunghoon, estaría igual o peor.

El partido finalizó y los miembros del equipo fueron a darse una ducha antes de pasar a los vestidores y seguir con sus clases. Heeseung se adelantó para salir antes que los demás y poder encontrarse con Jake antes de comenzar el último horario de clases.