Te esperaré hoy y siempre

Capitulo 4

Pero sin saber cómo, Becky se saltó 6 años de su vida para llegar al día del accidente, para llegar al momento que la dejó dormida por dos largos meses, la pelinegra empezó a removerse incómoda en la cama, cosa que hizo que su compañera despertara, Becky estaba bastante inquieta; freen sabía que era una pesadilla así que buscó la manera de despertarla.

Becky acababa de salir de la empresa, quería tener una cena con freen. La castaña aún se encontraba en la empresa firmando unos papeles cuando recibió la llamada de Becky diciéndole que la esperaba en casa y que no se fuera a tardar, la tailandesa sonrió bobamente al saber que su novia le iba a estar esperando para cenar, quizás ver películas y pasar un tiempo juntas ya que últimamente el trabajo no las dejaba tener un tiempo a solas.

Becky iba pensando en qué hacer de cenar pero no se le ocurría nada, pensó en pasar a comprar algunas cosas y quizás en el camino se le ocurriría algo y hacer así sorprender a su amada novia, cuando el semáforo se puso en verde prosiguió a seguir su camino pero cuando llegó a la mitad de la calle vi una luz que la cegó por unos segundos para después sentir como su coche era golpeados como su coche era golpeado con brutalidad por una camioneta negra, tal golpe hizo que su coche diera vueltas estampándose con uno de los locales que estaba cerca, el movimiento del carro hizo que se golpeara fuertemente la cabeza con el volante dejándola casi inconsciente y con una herida en la parte superior de la cabeza, la cual le bañaba la mitad de la cara en sangre. Becky trato de buscar su celular mientras escuchaba las sirenas de la ambulancia, bomberos y seguramente la policía, ella acababa de tener un accidente, pero lo que más le importaba en esos momentos era escuchar la voz de su tailandesa, pero lo fue imposible tomar el celular y marcar el número, su cuerpo no le respondía adecuadamente.

En esos momentos los bomberos la sacaron del carro el cual estaba hecho polvo no sabía que estaba pasando, se sentía aturdida, la cabeza le daba vueltas, veía borroso y lo único que quería era escuchar la voz de su novia diciéndole que todo iba a estar bien. La llevaron al hospital donde solo escuchaba los murmullos de voces, pero no lograba entender que era lo que decían, hasta que escuchó la voz que tanto anhelaba escuchar, la voz de Freen la cual sonaba con desesperación, todo pasaba demasiado rápido para Becky y cuando no pudo más cerró sus ojos y no supo nada.

Becky se incorporó violentamente en la cama con la respiración agitada, una capa de sudor en su frente, encontrándose con freen viéndola muy preocupada.

-¿Becky qué pasa?-

Becky no respondió solo atino por lanzarse a los brazos de la castaña, la cual al ver que esta no se calmaba la rodeó con sus brazos, apretandola a su cuerpo, dejando pequeños besos en la parte posterior de su cabeza de la pelinegra y trazando pequeños círculos en su espalda para tratar de tranquilizarla.

-Becky, amor ¿qué fue lo que soñaste? - preguntó freen con voz gentil y tierna pero a la vez con preocupación.

-El ac..cident...e - dijo Becky con la voz entrecortada debido a los sollozos, freen no preguntó más y solo optó por abrazarla, por apegarse más a ella para que la pelinegra se sintiera segura, poco a poco los sollozos de Becky fueron desapareciendo, más sin embargo freen no dejó de a besar de abrazarla. Becky por su parte se sentía segura, se tranquilizó al ver que la castaña no le hacía preguntas, solo la abrazaba como si el mundo dependiera de eso.

-¿Ya te sientes mejor?- preguntó freen en un susurro gentil.

-Ya, la impresión de todo lo que pasó me asustó.-

-¿Quieres hablar de eso?-

-Aún no - susurró la pelinegra.

-Está bien, ¿quieres que nos quedemos así?-