Peleando Unidos

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Travis estaba en serios problemas. Lo sabía. Tenía miedo porque justamente llamarón a su padre, ya que legalmente el seguia siendo su acudiente académicamente.

Y justamente estaba Kenneth y Henry, en el despacho del director. No se escuchaba nada, aunque Sally y el estaban justamente esperando afuera. Tenían mucho que pensar.

¿Y porqué estaba en problemas?

Porque quiso defender a Sally de un grupo de matones que lo fastidiaban desde hace semanas. Pero el problema fue cuando aquellos se metieron con su orientación sexual y se enojo a tal grado de acabar en una pelea, lo que lo terminaría llevando a él y a Sally a dirección.
Travis estaba molesto con Sal, porque no le había dicho nada de eso. ¿Qué clase de novio seria si no lo defendía? Sin embargo, ahora se había metido en problemas.

Y Sally estaba molesto con Travis, por haber hecho eso. No quería recurrir a la violencia, y no podía culparlo, Travis aún lidiaba con problemas de ira. Pero no era excusa para descontrolarse de esa forma.

Travis se encontraba en un dilema emocional. Por un lado, amaba a Sally y quería protegerla de cualquier forma posible. Por otro lado, temía las consecuencias que enfrentaría con su padre, quien no solo era homofóbico, sino que también tenía una relación tensa con él.

Mientras esperaban afuera en la oficina del director, Travis y Sally compartían miradas llenas de preocupación. Sabían que la situación no pintaba bien para ninguno de los dos. Travis se sentía culpable por haber dejado que su ira lo controlara y llevarlo a una pelea. Se reprochaba haber puesto en peligro su futuro académico. Y la verdad lo que pasaría después con su padre le asustaba.

Sally, por su parte, trataba de calmarse. No quería que Travis se metiera en problemas por él, pero al mismo tiempo, apreciaba su valentía al enfrentarse a los matones y defenderlo.

La puerta de la oficina se abrió y el director los llamó para entrar. Travis respiró profundamente mientras Sally le daba una mirada de apoyo. Ambos sabían que debían enfrentar las consecuencias juntos y ser fuertes el uno para el otro. Debían estar peleando unidos.

Al entrar en la oficina, se encontraron con la mirada severa del director y la presencia intimidante de Kenneth Phelps. Al otro lado, estaba Henry, quien comprendía a los muchachos.
Travis sintió un nudo en el estómago al ver a su padre allí, sabiendo que estaría furioso al enterarse de lo sucedido.

El director comenzó a hablar, explicando las medidas disciplinarias que tomarían debido a la pelea. Travis escuchaba con atención, pero su mente estaba preocupada por cómo reaccionaría su padre. Finalmente, el director hizo una pausa y miró a Kenneth, quien permanecía en silencio.
Kenneth miró fijamente a Travis, su rostro mostraba una mezcla de decepción y enojo.
El director continuó hablando, explicando las medidas disciplinarias que se tomarían, pero Kenneth no podía apartar la mirada de Travis. Finalmente, Henry decidió romper el silencio.

—Travis, ¿qué pasa?— preguntó con voz firme pero cargada de preocupación. —¿Por qué te metiste en una pelea? ¿Por qué pusiste en riesgo tu futuro académico?

Travis bajó la mirada, sintiendo el peso de las palabras de Henry sobre sus hombros.

— Lo siento, Señor Fisher— murmuró con voz temblorosa.—Solo... no soporté ver cómo se metían con Sally

Kenneth suspiró profundamente, tratando de controlar su ira.

Y henry por su lado, aunque no estaba de acuerdo con la violencia, entendía la frustración y el deseo de proteger a alguien que amas.

—Sé que te preocupa Sally, pero hay formas mejores de resolver los problemas— respondió Kenneth con tono más suave.—La violencia nunca es la solución

El ministro se levantó, no pudiendo contener más su rabia.

—Esto es una completa estupidez. Si mi hijo se metió en esa pelea, no es mi culpa. Se lo busco, estoy de acuerdo en cualquier castigo que le quieran exigir. Por mi mejor. Sobre todo por culpa de aquel chico.—Comentó mientras señalaba a Sally—El está influenciando en Travis de forma negativa.

Sally intervino, rompiendo el silencio.

—Señor Phelps, estoy agradecido por lo que Travis hizo por mí. Pero también quiero dejar claro que no busqué esa pelea y estoy en contra de cualquier forma de violencia.

El director asintió, reconociendo las palabras de Sally.

—El señor Fisher tiene razón.— dijo. —La violencia no es la respuesta, pero también es importante defenderse y proteger a quienes amamos. Travis, entiendo tu intención, pero debemos aprender a manejar nuestras emociones de una manera más constructiva.

Travis asintió, sintiendo un alivio momentáneo al saber que su padre no podia hacer mucho, mientras que Henry, comprendía en parte su actuar. Sabía que aún había mucho trabajo por hacer para controlar su ira y encontrar mejores formas de resolver conflictos.

El director concluyó la reunión con un plan de acción para ambos jóvenes. Habría consecuencias disciplinarias, pero también se les brindaría apoyo emocional y se le animaría a participar en programas de manejo de la ira y resolución pacífica de conflictos a Travis.

Kenneth no dijo nada más, solo salió de ahí sin dirigirse ni con un adiós a su hijo.

Mientras salían del despacho del director, Travis y Sally se miraron con determinación.  Sally le dio una sonrisa reconfortante.

—Todo estará bien, no te preocupes.

Travis le devolvió la sonrisa, sintiéndose agradecido por tener a Sally a su lado. Sabía que no sería fácil, pero se sentía motivado para cambiar y ser una mejor versión de sí mismo.
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No se que decir. Aunque no sabía cómo hacer este capítulo, la verdad me gustó.

Los quiere;

Lannie

30 Días OTP(Sally x Travis)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora