Auxilio

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ELIEL

Solo dejé que los días pasaran, sé que Julián quizás no tenia ánimos de hablar de lo que le pasaba, no pude contarle lo que paso con esa chica. Tengo que aceptar que parecía muy calmado, pero aun teniendo algo de conocimiento y la practica es algo difícil tener toda la seguridad del mundo, podemos equivocarnos, somos humanos, ¿no? En fin ella estaría mejor, al menos eso esperaba.

(...)

Ya estando en el instituto recordé que tenia examen, por dios no había estudiado, solo sé que no puedo bajar el índice, si no adiós beca.

-Eliel -me gritan por la espalda, volteo y viene un chaval corriendo

-Dime, ¿Qué pasa? - el chaval apenas calmando ligeramente la respiración menciona

- Es Julián - siento una sensación rara, lo tomo del hombro

- ¿Qué pasa con Julián?- ya entre un tono molesto y asustado

- Está, está en el suelo, se ha desmayado y le están dando asistencia médica - lo quedo viendo confundido a lo que me ve y me señala la dirección en la que se encuentra, comencé a dirigirme hacia el lugar señalado primero caminando, a medida avanzaba fui trotando hasta que empecé a correr, chocando hombros con los del pasillo y gritando que me brindaran permiso, paso la puerta principal y hecho un vistazo a los lados, vi una ambulancia llevarse a una persona, esta se encontraba con un ventilador artificial mientras la subían a la ambulancia, a este punto tiro la mochila y corro nuevamente, llego y los paramédicos me detienen mientras los demás alumnos le mencionan que soy su hermano.

- ¿Sabes si este chico es alérgico a algo? - menciona el paramédico mientras cierra una de las puertas, yo solo observaba a Julián, estaba irreconocible

- chico, oye, préstame atención, él se encuentra mal y si tú sabes puedes ayudarnos, ¿recuerdas si él es alérgico?

-En eso vino a mí el recuerdo en casa de unos tíos cuando nos fuimos al cerro, en lo que recogíamos leña en el denso bosque de la comunidad fue picado por una abeja, la cual obstruyo sus vías respiratorias, provocándole urticaria junto a enrojecimiento de la piel, siempre contaba con una mochila en la cual había un dispositivo inyectable con una dosis de adrenalina y debido a la buena comunicación entre nuestras familias los adultos estaban al tanto de la misma, mi tío se acercó a el y agarro de su mochila un artefacto para inyectarlo y contrarrestar los efectos de la picadura de la abeja, estuvo cerca de obstruir por completo sus vías respiratorias, vale mas de Amanda (mama de Julián) era muy cuidadosa con el.

Vuelvo a mi y le digo que si, Julián es alérgico a las abejas, normalmente camina una inyección para la misma en la mochila, que revisaran la misma.

El paramédico revisa la mochila, al no encontrarla se regresa a mi y me dice que me suba a la ambulancia, solo que intentara no estorbar en la misma.

Me subo y estoy al par del auxiliar, este me pide amablemente que siga asistiéndolo con la respiración manual, accedo mientras lo observo, estaba algo inflamado del rostro, inconsciente pero estable según los instrumentos médicos, aplicaron una inyección durante el trayecto al hospital se veía un poco inflamado, estaba algo irreconocible, su mochila estaba en el suelo y de ella se asomaba una fotografía, no reconocía a la persona por lo que la tomo y observo mas detenidamente, era una niña al lado de el, estaban pequeños al parecer, nunca había visto una fotografía de ella y a su vez jamás habíamos hablado sobre eso. Era muy raro todo, pero solo pude guardarla y cerrar la mochila.

Llegando al hospital nos dirigimos a emergencia, ya lo estaban esperando ,me dijeron que me estuviera en la sala de espera, hasta donde se, le aplicaron un par de medicamentos y lo mantuvieron en la sala solo por observación y hasta que despertara, mantuve una comunicación los padres y hermanos de Julián, no podría imaginar como se sentiría Amanda con esta situación, pasaron las horas y me llamaron para poder quedarme con el.

ElielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora