Suena alarma de teléfono
Abro los ojos y escucho un grito desde el pasillo -Sofía, ya levántate o se nos va a hacer tarde-
Con mucho pesar y cansancio logro sentarme en mi cama para caer nuevamente en ella, es domingo lo que significa qué hay que ir a misa y después a comer con mis abuelos, sin embargo, hoy es un domingo diferente, hoy Sergio corre por primera vez el Gran Premio de su casa y todos vamos a ir pero, primero tenemos que ir a misa.
Rápidamente entro a la regadera y me sumerjo en el chorro de agua fría que cae, poco a poco se vuelve tibio hasta alcanzar esa temperatura que me gusta, hirviendo. Termino de alistarme y bajo a desayunar, Doña Sara hizo huevos con jamón y frijoles, nada del otro mundo pero, verdaderamente una delicia, mientras termino mi jugo de naranja baja mi mamá hablando (casi gritando) con mi papá sobre lo emocionada que está por la carrera de Sergio.
Ahora un poco sobre mí:
Desde que tengo memoria mis papás siempre han estado metidos en el mundo del Motorsport, y desde que Sergio alcanzó la máxima categoría, ellos no se separan de las carreras. Sergio, o Checo, como es conocido en la Fórmula uno, es hijo de la mejor amiga de mi mamá, mi tía Marilú. Ambas se conocen desde la primaria y han hecho de todo juntas, TODO. Siempre hemos convivido con la familia de Sergio, vacaciones juntos en Vallarta, cenas, fiestas, todo. Antes vivíamos todos en Guadalajara pero, por cuestiones de trabajo, nos fuimos a vivir a la CDMX cuando cumplí 12 años. Y otra cosa, desde que tengo memoria, he estado perdidamente enamorada de Sergio, bueno... quizá perdidamente es una palabra muy fuerte pero, es la verdad; no se me olvida que es 10 años más grande que yo y por eso, se que cualquier cosa con él es imposible.
—Sofi, buenos días hermosa—
—Buenos días papi—
—Pero que consentida eres eh, ya vi que Sara preparó tu desayuno favorito—
—Sí sí sí, y si sigue desayunando eso, ya no va a entrar en su leotardo—
—Amara, por favor no le digas eso a la niña, princesa, si quieres más sírvete sin problema—
—No te preocupes papi, ya estoy satisfecha, voy a ir a lavarme los dientes—
Después de ir a misa y de pasar a dejarle unas flores a los abuelos, llegamos a nuestro destino, el Autódromo. Hay mucha gente esperando a entrar, y es que no los culpo, es la primera vez que Sergio, corre en su casa dentro de la máxima categoría. Mientras vamos en la camioneta, mis papás van discutiendo sobre la estrategia que debería seguir Sergio hoy, yo voy con mis audífonos escuchando un poco de música para calmar esta ansiedad por ver tanta gente en el mismo lugar.
—Sofía, en la bolsa junto a ti está una gorra, por favor póntela, es para apoyar a Checo—
Junto a mi hay una bolsa de color gris, la abro y hay una gorra, es para mi
—Ándale, deja de verla y póntela, la mando Checo especialmente para ti—
Abro la bolsa y saco la gorra de color gris con negro, no combina con lo que traigo puesto pero, mi mamá está siendo muy insistente en que la use. Termino de desdoblar la gorra cuando veo que cae un papel de ella, es un post it que dice:
Hola bicho, gracias por venir a verme, esta carrera es muy especial y me hace mucha ilusión saber que estás aquí, espero escuchar tus porras.
- Checo
Pd. No se me olvida el helado de chocolate que tenemos pendiente
Lo veo y no lo creo, tenía meses que Sergio y yo no hablábamos, 4 para ser exactos. Desde que empezó el 2015 no habíamos tenido mucho tiempo para platicar.
Y al final fue muy tonto de mi parte pensar que ese día iba a ser diferente, la carrera terminó, Sergio quedó en 8º, hubo una gran cena en su honor a la cual no fui porque me sentí muy mal; desperté al día siguiente y tenía un mensaje de Sergio que decía:
Tú mamá me enseñó tu foto con la gorra, muchas gracias bicho
Espero te mejores y que nos veamos pronto, te extraño muchísimo, te mando un beso
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Mi nueva estrella, el campeón
FanfictionSofía es una chica que le fascina la Fórmula 1 y el ballet. Sus padres son padrinos de Checo Pérez y ella ha vivido enamorada toda su vida de él, jamás pensó que lo podría sacar de su cabeza hasta que conoce al compañero de Checo, Max. Sofía quiere...