⠀❛ㅤSWEET AND SOUR, HEART DEVOUREDㅤ( 天 )ㅤbbangsaz

12

Los ojos de Hanni se abren con sorpresa cuando la puerta del apartamento de la castaña es finalmente abierta. Porque Minji se encuentra vistiendo únicamente un jean tiro bajo con un top algo pequeño mientras su cabello castaño se encuentra mojado y despeinado.

A la vista se encuentran los tatuajes que la mayor tenía por su cuerpo, y Hanni no puede evitar quedarse completamente embobada observándolos. Sintiendo la necesidad de pasar sus dedos por la tinta en su cuerpo.

Por lo que parecía, acababa de salir de la ducha. Y aquello no tendría que hacer que algo en el estómago de la chica se remueva de la manera en la que lo hace.

──Oh.──Dice mientras su rostro se enciende levemente.──Siento interrumpir, no sabías que estabas ocupada.

Minji sonríe divertida ante su reacción.

──No lo estoy.

Hanni la mira de arriba abajo, lamiéndose los labios sin darse cuenta.

──¿Segura?

──Claro.──Minji suelta una pequeña risa.──¿Quieres pasar?

Hanni asiente, entrando al apartamento de la chica con una pequeña sonrisa nerviosa en sus labios.

──Tengamos una cita.──Dice, deteniéndose en mitad de la sala de la coreana y girándose para mirarla.──Ahora mismo.

Minji sonríe divertida, acercándose a la menor con los ojos repletos de cariño.
Sus manos encuentran las caderas de Hanni para acercándolo hacia ella.

──¿Una cita?──Pregunta en voz baja.

──Sí.──La australiana asiente con una sonrisa en sus labios, feliz de estar entre los brazos de Minji.

Kim la mira con aquella sonrisa que solo Hanni podía causar en ella, con aquellos ojos brillantes que solo parecían iluminarse de aquella manera cuando Hanni se encontraba cerca.

──¿Y de que tipo de cita estamos hablando?──Pregunta, levantado una mano para apartar uno de los mechones de cabello que se encontraba en el rostro de Hanni.

──Una con películas, helado y mis maravillosas galletas.

──Mhmm ¿Me has hecho galletas, cielo? Suena bastante bien.

El corazón de Hanni enloquece en su pecho mientras sus mejillas se encienden levemente.

──Exacto, no puedes negarte.

Minji acaricia las caderas de Pham por encima de su suéter, sonriendo ampliamente.

──No planeaba hacerlo.

Hanni sonríe satisfecha con la respuesta antes de tomar el rostro de la contraria entre sus manos para dejar un casto beso sobre sus labios.

Y es que no importaba las veces que lo hicieran, siempre se sentía como la primera vez, cómo si un millón de fuegos artificiales explotaran dentro de ambas, como si flores nacieran en la época más fría del año, como la brisa más refrescante un día caluroso de verano, causando que sus corazones se acelerasen de aquella frenética manera.

Y si hubieran sabido que el besarse se sentía así, lo hubieran hecho mucho antes.

──¿De que películas estamos hablando, princesa?──Le pregunta la mayor cuando se apartan, apoyando con delicadeza su frente junto a la de Hanni.

──Las más estúpidamente románticas que haya en Netflix.

Las palabras hacen que Minji suelte una pequeña risa que causa que el pecho de Hanni vibre.