Rosas y Azúcar | Jenlisa

Capítulo 1

Jennie estaba nuevamente en casa ayudando a sus cachorros a terminar sus deberes, mientras le explica a su niña la forma más sencilla de hacer las restas y sumas, su niño coloreaba el dibujo que acompañaba su tarea. 

—¿Entendiste, corazón? —Wonyoung asiente—Muy bien, ahora inténtalo tú.

Wonyoung se aventuró y trató de resolver el ejercicio como le enseñó su mamá, con ayuda de sus dedos, logró dar con el resultado que estaba buscando. Eso la emocionó.

 —¡Lo hice, mami, lo hice!

Jennie celebró con su niña y la atrajo hacia ella para plantar varios besitos que terminaron en pequeñas risitas por parte de la pequeña, haciéndolo sonreír también.

—¡Muy bien, mi dulce niña, muy bien!

Yeonjun no quiso quedarse atrás y se acercó hasta su mami porque quería recibir cariño también.

—¿Yo también puedo recibir afecto, mami?

Jennie sonrió y no tardó mucho para envolver sus brazos en el pequeño cuerpo de su hijo. Ahora ellos estaban dándole besos  a la omega en las mejillas, murmurando algo que conmovía su corazón y volvía a sentir ese agradable calorcito extenderse por todo su ser.

—Mucho mejor, ¿no es así? —Murmura Jennie dejando una caricia en las mejillas de sus cachorros con una cálida sonrisa—¿Quieren ayudarme a preparar la cena? Planeaba preparar algo de pasta y ensalada.

—Yo te ayudo, mamá. 

—Cuenta conmigo, mami Jen.

—Gracias, bebés. ¿Terminaron sus deberes de la escuela?

Ambos niños asienten con la cabeza.

Es así como Jennie y sus pequeños ayudantes se aventuraron a preparar la cena de esa noche. Lisa llegó a casa silbando una melodía que lleva escuchando todo el día, trajo algunas cosas que necesitaban de la tienda en una mano y un ramo de flores junto con un sobre en la otra.

—Familia, estoy en casa.

Wonyoung y Yeonjun salieron a recibirla.

—¿Tienes la sorpresa de mami, mamá Lis? —susurran ambos, Lisa les contó su idea cuando lo encontraron hablando por teléfono con sus tías.

—Aquí está, mis niños, se lo entregaremos cuando terminemos de cenar. Sean discretos hasta entonces, ¿entendido? 

Jennie venía entrando del jardín, donde también tenía su pequeño huerto de vegetales, suspirando de alivio cuando encontró a sus hijos y esposa en su sala.

—Alfa, ahí están. Estuve buscándolos por todos lados, ya es hora de cenar. 

Wonyoung y Yeonjun salen emocionados hacia la cocina, Jennie les sonríe y luego pasa la mirada hacia Lisa para acercársele y tomar algunas de las bolsas. 

—Lamento haberte hecho esperar, Jen.

—No importa, andando, nuestros cachorros deben estar esperando por nosotras.

Jennie quería preguntar acerca del sobre que tenía Lisa en sus manos, pero se le fue la idea cuando uno de sus retoños le habló.

Lisa estaba tranquila por fuera, perdiendo el control por dentro al pensar en lo que diría Jennie cuando le entregue ese sobre, iba a seguir retrasando lo mejor que podía, pero sus hijos pensaron que era buen momento para iniciar.

—Mami —llama Wonyoung, mirando de reojo a su hermano y a su madre. Ella era la más entusiasta por decirle porque sabía que esa sorpresa sería del agrado de su mamá—¿Te gusta mucho cocinar?