The wrong man

Cap.1: Pecaminoso error

Sentado en aquella barra de bar Pete vio la foto en su teléfono, en ella aparecían dos tipos, pero solo prestaba atención a uno de ellos. Su mirada viajo al hombre al otro lado del bar reunido en una mesa con un grupo de amigos, hasta ahora no había hecho nada que llamara la atención, pero... la noche aún era joven. ¿Cómo llegó a esto? Se preguntó. Él había sido investigador de las fuerzas especiales por más de media década, ahora, decidido a buscar un nuevo rumbo había incursionado en ser detective privado, usando sus dotes para descubrir cosas y llenarse de dinero con ello, con lo que no contaba era con los pedidos extraños llegando a él...

# ocho horas antes #

-estas loco ¿Verdad? No voy a hacer eso Porsche- dijo divertido tomando un trago de su gaseosa.

-por favor Pete, él es... es mi hombre soñado. Llevo toda la vida buscando alguien como él y ahora...

-déjame adivinar- dijo divertido- un tipo malo con dinero y carisma, todo un dandy.

-¡Exactamente!- sonrió en grande- él es muy malo y está forrado en dinero, además... ¡Va a pedirme matrimonio! Me conto su hermano, estoy tan emocionado.

-entonces... ¿Por qué investigarlo?

-porque antes de oficializar era asquerosamente promiscuo- dijo irritado- necesito saber que soy el único en su vida, por más bueno que este y más dinero que tenga... no puedo ser suyo si no me es fiel, eso sería todo- su mirada derrotada lo hizo dudar.

-déjame pensarlo, yo... no soy un cazador de infieles ni nada así, mi último caso fue un vendedor de animales exóticos, todo un caso internacional, esto es...

-por nuestra amistad, piénsalo, si todo sale bien... podrías ser mi padrino.

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Volviendo al presente Pete pensó en ello, su amistad con el de piel tostada era extensa, se habían salvado en más de una ocasión y ambos lo daban todo por el otro ¿Cómo negarse? Por eso le mando un mensaje esa tarde diciendo que lo haría, pero sería rápido. Porsche se emocionó mandándole una foto, la misma que veía ahora, con el mensaje de que el tipo sexy de sonrisa perversa era su chico, el castaño sensual. Pete vio la foto de nuevo admitiendo a regañadientes que su amigo tenia razón, el tipo era sexy.

Vio hacia la mesa notando la vista del castaño, sorprendentemente estaba puesta en él, una sonrisa en su rostro. Se sintió perdido, confuso, por lo que aparto la mirada hacia su vaso pensativo ¿Qué debía hacer? No estaba seguro, pero sintiéndose osado y queriendo terminar con eso volvió la vista hacia donde su objetivo estaba y se sorprendió de no verlo, miro alrededor tratando de verlo ¿Se había distraído tanto?

-que... idiota soy...

-¿Idiota? Yo diría que sexy es una mejor palabra para definirte- la voz sensual cayo en su oído haciéndolo girarse hacia el otro lado, junto a él y apoyado en la barra estaba su objetivo, luciendo tan pecaminoso como la foto que vio, el tipo era la definición de peligro- ¿Cómo estás? Estaba pensando ofrecerte un trago, pero...- vio el vaso de gaseosa en su mano y sonrió de lado- puedo ofrecerte otro de esos si queres.

-no... estoy interesado, pero gracias- dijo nervioso ¿Qué demonios? Debía asegurarse de que el tipo no se metiera con nadie, pero ir a por él... que gracioso era en realidad.

-vamos, te vi mirarme desde hace rato- se inclinó hacia él pegándose a su rostro- eres exactamente del tipo que me gusta ¿Por qué no admitir que te gusto y empezar la diversión?

Su estómago estaba revuelto. Pensó en la ilusión de Porsche, queriendo casarse con ese tipo, diciendo que lo amaba, que era lo que tanto había buscado, y el desgraciado solo...