Donde caben 2 caben 3

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Los Omegas pudieron darse cuenta que sus pequeños intentos de coqueteos parecían surgir efecto pues apenas unos meses después que inició su fase 2 el Alpha era más agradable con ambos (más con Barry), les prestaba más atención incluso lo pudieron ver formar una ligera sonrisa que no mató a Flash de un ataque por puro milagro y lo más importante al parecer del Omega castaño les había dejado ver a su cachorro, el Alpha se ve de aquí a la luna lo sobreprotector que es con su pequeño.

El niño se presentó cómo Richard Grayson, al principio los Omegas se preocuparon un poco, el niño no parecía un niño era demasiado serio, por suerte conforme el pequeño iba tomando confianza era más imperativo y hablador, se llevó muy bien con ambos Omegas principalmente con Hal también le gustaba mucho los olores de ambos, el niño pronto iba a dejar de ser un cachorro e iba a presentar su casta por lo que los olores a menudo le llegaban a resultar repugnantes pero el de los Omegas era fresco lo que le traía mucha tranquilidad y sin quererlo le recordaba a su propia madre, quizá por eso se llevaba mejor con Hal pues era su aroma uno muy parecido a su progenitora.

Su padre pudo notar cómo su cachorro inconscientemente se restregaba en el cuello del Omega dominante en busca de impregnar su olor en el, era algo común que hicieran los cachorros con sus madres, pero eso era lo curioso, Hal no era su madre y sin embargó el pequeño lo seguía como un patito, ya ni con el, Barry también notó ésto y disimuladamente tomaba fotos y videos de su interacción era tan adorable verlos juntos hacia a su Omega chillar de felicidad.

Una vez que el cachorro se despidió de los Omegas subió al Batimóvil de su padre y se fueron a gran velocidad a su mansión.

- ¿Qué te parecieron? - el Alpha inicio con sus habituales interrogatorios

- Flash es algo ruidoso pero es asombroso y linterna verde es muy agradable - confesó con un ligero sonrojó en sus mejillas

- ¿Te gustaría volver a estar con ellos? - ante la pregunta el Alpha pudo ver cómo los ojos de su cachorro se iluminaron y asintió tímidamente su Alpha interno ronroneó de gustó al ver que los Omegas eran aprobados hasta el momento por su cachorro, aún así quería investigar más sobre sus supuestos destinados y ver si eran aptos para confiarles a su cachorro, también los Omegas parecían ser ignorantes del tema lo que era una cierta ventaja, ahora con casi todo resuelto le faltaban dos cosas de suma importancia por resolver y una de ellas tenía que ver con un gato...