°•°•°•°✨Dos mundos se encuentran✨°•°•°•°

🍭🧁Mundo 2/2🧁🍭

—¡Aaaaaah!—

Las dos gritaron cuando fueron transportadas a otro lugar por culpa del espejo callendo desde el cielo hasta una cosa esponjosa que estaba abajo

—¡Au! ¡¿Anya estás bien?!—

—Chi, Anya se encuentra bien, Mirai también está bien?—

—Hm—

Una vez confirmados sus estados miraron a su alrededor, ¿dónde estaban?

Todo era colorido y al parecer de.... ¿dulce acaso?

—¿Dónde estamos Anya?—

—Si Miri-chan no sabe, Anya menos sabe dónde estamos—

Las dos se pusieron de pie, habían caído en una especie de algodón de azúcar, Anya tomo al valor para arrancar un pedacito y comerlo, sonrió ante el sabor dulce

—¡Si! ¡algodón de azúcar!—

Miri se sorprendió, las dos tomaron un pedazo para el camino, mientras más veían más se asombraban, todo era de dulce y parecía mágico

Llegaron a un palacio pero no había nadie, más bien, no había nada vivo a su alrededor, todo era dulce y más dulce, no había rastro de vida aparte de ellas dos

—¡Anya mira el cielo!— exclamó Miri, la peli rosada miro hacia arriba levantando la cabeza y se sorprendió al ver que se veía el espacio donde habían estado antes de caer allí

—¡¿Que?! ¡¿que?!—

—¡¿Cómo se supone que lleguemos allá arriba?! ¡será imposible!—

Anya y Miri comenzaron a entrar en pánico al no ver a nadie más a su alrededor y saber que sería imposible salir de ese lugar que en un principio parecía encantador no mejoraba nada

¡Era una pesadilla! con pánico intentaron saltar para llegar arriba aún sabiendo que esto sería claramente imposible

—¡No puede ser! ¡¿que vamos a hacer Miri?! ¡Anya quiere a su mamá de nuevo!—

—T-tranquila Anya-chan, seguro encontraremos una manera de salir de aquí, digo, debe de haber una forma de salir, ¿no?—

—Eso creo....Oiakaha debió de habernos dicho de esto y así decirnos cómo salir, ahora Anya y Miri están atrapadas y encerradas aquí— Anya se sentó en el suelo que también era de algodón de azúcar

Miri suspiro y copio a Anya sentándose a su lado abrazando sus rodillas esperando sus padres fueran por ella, ahora que lo veían bien, ese mundo se veía sofocante

Además, no había comida saludable , no es que comieran saludable a menudo pero, no había carne ni nada, solo dulce, agua dulce, malteadas gigantes y nada más, ni si quiera leche

Esperaban la llegada de Oiakaha o de sus padres cuando la tarde callo, mientras se hacía de noche el mundo se veía cada vez más aterrador y distorsionado

—Eto....soy yo o el mundo parece volverse aterrador?— pregunto Miri con angustia

—S-se volvió más aterrador—

En eso, un rugido se escuchó haciendo a ambas cachorras chillar con temor y correr al lado opuesto de dónde había venido el rugido, pronto, unas pisadas pesadas y un jadear que parecía de una bestia comenzaron a escucharse cada vez más cerca, como si esa cosa las estuviera persiguiendo

—¡¡Aaaah!! ¡¡corre!!—

Anya y Miri corrían por sus vidas, lograron llegar a un árbol alto el cual no dudaron y escalaron subiendo hasta lo alto para refugiarse allí en el hueco del árbol donde apenas cabían juntas