V

224 35 0
                                    

Si me molesta, me entristece, pensé que por todo lo que habíamos pasado era yo suficiente”

Aquellas palabras hacían eco en la cabeza de Philza...
El rubio se sentía realmente mal por la experiencia aunque sintiera enojo por aquella tan amarga emoción que sentía en su ser.
Se encontraba con la mirada perdida pensando en como se preocupaba por la salud mental del amante de las calacas.
—How does Missa see me now? What did I do for him to have that idea of me?(¿Cómo me ve ahora Missa? ¿Que hice para que el tuviera esa idea de mi?)—
Millones de preguntas le bombardean la cabeza sin poder dejarlo pensar con claridad.
—I need a moment (Necesito un momento)....—
Salió de sus pensamientos y decidió ir a caminar para sacar esos pensamientos de su cabeza.
Estaba caminando cerca de la casa de Slime, el aire fresco le pegaba suavemente en su fino rostro, aunque el ambiente era tranquilo el aún sentía esos aires de estrés. Caminaba cabizbajo sin tomar mucho en cuenta en su alrededor.
Y cuando menos se había dado cuenta ya había chocado con alguien pero aún seguía igual de metido en su cabeza.
—Está bem? (¿Estás bien?)— Preguntaba colocando su palma de su mano en la espalda del alado.
Philza se quedó unos momentos callado, pero había cerrado sus puños con fuerza.
—Que? Seu marido está com raiva? (¿Que? ¿Se enojo tu esposo?) Kkkkk— Hablaba con un tono burlesco y sarcástico.
De un momento a otro, el rubio golpeó a Forever con fuerza proporcionando un golpe en la cara del otro chico.
—Que porra você pensa que está fazendo!? (¿¡Que mierdas crees que haces!?)—
Lo miraba con enojo en el suelo puesto que se había caído mientras se limpiaba con su brazo su nariz que ahora estaba sangrando.

—You're an idiot or do you? Why the hell are you saying that to my Missa! (¿Eres idiota o te haces? ¡Por qué mierdas le dices eso a mí Missa!)— En los ojos del neerlandés se refleja odio.

Philza se acercaba a Forever a paso lento con una mirada sería. Al llegar le plantó una patada en el estómago al de trenza provocándole que se quedará sin aire.
Forever se quedó con una mirada sorprendida al pensar de que "amado" fuera capaz de hacerle eso a el.
—Do you know what you've done? You've ruined my entire beautiful marriage! You're a fucking homewrecker cat! (¿Sabes que haz hecho? ¡Me has jodido todo mi bonito matrimonio! ¡Eres una maldita gata rompe hogares!)— Le recriminaba.
—O que eu disse-lhe?(¿Que le dije que?)—
Se trató de defender pero era inútil por qué el otro no lo estaba escuchando.
—O que você acha que eu disse a ele!? Você ao menos sabe o que aconteceu com ele...? Eu nunca disse nada de ruim para ele (¡¿Que piensas que le dije!? ¿Acaso sabes lo que paso con el...? Yo nunca le dije nada malo)— se encontraba contraído en el suelo y poco a poco se recuperaba y tomaba conciencia después de aquel golpe.
Philza no prestaba atención de lo que decía el otro chico rubio y con un semblante serio le dio proporciono otro golpe en debilitado estómago del otro.
Forever se volvió a caer en el miserable suelo retorciéndose de dolor.
Philza le había gustado ver al otro sufriendo de dolor sacando una pequeña sonrisa en su rostro pues el sabía que el amante de calaveras nunca le mentiría y se largo dejando al chico adolorido y abandonando a su suerte al pobre.

Paso un rato y al parecer Forever ya tenía compostura, estaba sentado en el suelo recapacitando y reflexionando sobre lo que había pasado y en aquella situación si había dicho algo ofensivo al azabache.
Ya era estaba oscureciendo y a la lejanía se observaba una sombra.
Esta sombra se acercaba cada vez más al chico rubio dejando contemplar que era el chico por el que se había peliado con Philza.
—¿Estas bien?— hablo Missa
—Você vem tirar sarro de mim?(¿Vienes a burlarte de mi acaso?)— mencionaba con enojo cabizbajo.
Missa lo miraba compasivamente  y se acercó y se arrodilló junto al brasileño para ponerle su mano en su espalda dándole a entender que todo estaba bien

—No quiero meterme en lo que te sucedo pero sabes que tienes mi apoyo si algo sucede—

Forever están hecho un remolino de emociones, por una parte se sentía mal por haber hecho sentir mal al azabache, pero por otra parte se sentía enojado por la pelea que había tenido con Philza por su “culpa”.
El rubio estaba bastante nervioso pues no sabía que esperar del amante de calaveras ¿Y si al final le hacía daño? Pero no era así pues Missa se estaba quedando con el y hablando sobre cualquier cosa, tiempo paso y Forever le tomo confianza y volteo a verlo haciendo contacto visual durante unos altos segundos, en un momento fugaz Missa se acercó al brasileño y le plantó un corto beso en los labios del otro, Forever se confundió por la acción del pelinegro.

𝓢𝔀𝓮𝓮𝓽 𝓞𝓫𝓼𝓼𝓮𝓼𝓲𝓸𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora