Naruto ni la realidad me pertenecen son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí.
Sin mas que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo de mierda.
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Juande Ramos se sobo el puente de su nariz al ver el desastroso partido que se estaba desarrollando.
Estaban perdiendo.
Un 2-0 desastroso en todo los sentidos de la palabra.
Everton: 2
Tottenham: 0
Su ataque ya no tenía oxígeno, su medio campo apenas podía mantenerse y su defensa era era una coladera.
De no ser por ese niño Gareth Bale que se estaba luciendo echándose dos delanteros y deteniendo su paso el sólo.
Necesitaba ataque.
Podía escuchar a los aficionados silbar en desagrado y los comprendía, incluso él se sentía avergonzado de haber salido a la cancha con su equipo.
-¡VAMOS GILBERTO! ¡BUSCA ESPACIOS Y CREA JUGADAS PARA LOS DELANTEROS!-Grito el entrenador Ramos colérico al ver que sus jugadores se habían encerrado.
El miedo les había consumido, no querían un 7-0 por lo que de medía cancha casi no salían, jugando a pases para terminar el partido de una vez por todas.
Minuto 74.
Se mordió la lengua de frustración ya que no había nada que pudiera hacer, por más gritos que daría solo serviría para que se encerraran más.
Gareth también estaba frustrado según se podía ver, enviaba balones afuera pero no servía de mucho.
Entonces decidió cambiar esta mierda.
Rápidamente observó su banquillo detenidamente pensando quien sería el afortunado de ir a perder aquí contra el Everton.
"Señor"
Una voz masculina le habló mientras que él veía a a su derecha donde estaba su entrenador de técnica Ricardo Moniz.
-¿Tienes una idea?-Pregunto Juande mientras que observaba a Ricardo quien negó ante aquello.
-Por favor señor, se acuerda de lo que hable con usted?-Pregunto Ricardo mientras que Juande pensaba un poco.
"Señor, podría darle minutos a uno de los delanteros de la banca, pocos si quiere"
-Oh cierto, te prometi eso-Hablo Juande mientras que veía al muchacho que Ricardo le había hablado.
Naruto Uzumaki según podía recordar.
El niño no hablaba ni tampoco se quejaba, estaba ahí con su gran abrigo para el frío y sus brazos metidos en las axilas para calentarlos.
Debido a que estudiaba en la universidad 5 días a la semana entrenaba de noche, había echo las pruebas para los equipos y subido rápidamente de la cantera al equipo principal.
Pero Juande no le había dado tiempo debido a que sinceramente no lo conocía para nada, sábados y domingos llegaba pero rápidamente ingresaba en el gimnasio con Marcos para comenzar su rutina con ellos.
Era un fantasma.
Juande había solicitado que lo devolvieran a la cantera ya que no le servía un jugador así, a ningún equipo de primera le servía.
Mencionando que no sabia si hablaba inglés en primer lugar ya que era japonés que había venido justamente por la universidad con una beca deportiva.
