Eɴᴅ. Nᴏᴛʜɪɴɢ Lᴀsᴛs Fᴏʀᴇᴠᴇʀ

374 49 30
                                    

Me pongo el vestido, una capa de maquillaje y tomo un bolso pequeño, aunque no quiera, tengo que salir por la ventana para no ser vista por mi hermana, quien escucho golpea mi puerta con enojo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me pongo el vestido, una capa de maquillaje y tomo un bolso pequeño, aunque no quiera, tengo que salir por la ventana para no ser vista por mi hermana, quien escucho golpea mi puerta con enojo.

— ¡Más te vale que abras la maldita puerta, Marjorie! — salto por el techo hasta la escalera que tenemos y corro.

Corro al menos unas tres cuadras hasta que veo el auto de William, él está recargado sobre él y fuma un cigarrillo, el cual apaga en cuanto me ve.

— Vamonos rápido, mi hermana va a matarme si me ve aquí.

En cuanto comienza a conducir también comienza a lanzarme halagos aunque ya no tienen la misma reacción que antes, dándome una ligera esperanza en el fondo de mi.

— ¿Te molesta si pasamos unos minutos al restaurante? Olvidé recoger algo importante — suspiro mientras le muestro mi mejor sonrisa y asiento.

— La noche es larga.

Muy larga de hecho, no sé que podría pasar.

Deja el auto en el estacionamiento y me quedó mirando curiosa al vecino, es igual al auto de Mike.

— No me tardo, después seré todo tuyo, solo quedate en el auto, ¿si? — se acerca a mi y me da un beso, lo sigo sin separarme y al final solo quedo con una sonrisa de tonta.

Él baja del auto y camina a la entrada secreta de la pizzeria, yo solo lo observó alejarse y quiero llorar, más bien, empiezo a llorar. Respiro con fuerza y mientras limpio mis lágrimas saco la cámara de mi bolso y miro las fotos que le tomé.

— Maldito, William — por impulso aprieto un botón del aparato y una de las fotos se borra, me arrepiento de inmediato.

Mientras intento recuperarla, un escalofrío me recorre completa y una voz tenue, casi en un susurro dice:

— Solo está jugando contigo, dice que le diviertes.

— ¿Quién? — respondo creyendo que mi cabeza me está haciendo una mala jugada.

— El conejo amarillo — al oír como esa pequeña voz se hace más fuerte, me giro a ver en el asiento del conductor y me asusto.

Hay un pequeño niño rubio sentado mirándome, me asusto más cuando en un parpadeo desaparece y pienso que es mejor idea salir a buscar a William.

Estoy aterrada, así que no me doy cuenta que estoy entrando por la puerta principal, pero no me importa. Cuando voy directo a la bodega, alguien me jala del brazo y me hace esconderme junto a él, es Mike.

— ¿Qué carajos haces aquí, Marjorie?

— ¿Qué está pasando? — evito su pregunta al no saber que responderle exactamente.

Él tampoco sabe que responderme, así que solo hace una seña para que guarde silencio y me quede agachada mientras se va a buscar a alguien más.

Solo quiero encontrar a William, así que me escabullo por el pasillo que va hacia la bodega, pero unos ojos brillantes me detienen el paso y de la oscuridad aparece un animatronico que no vi antes en la pizzeria, pero si lo vi en la habitación de Vanessa, en una foto. El conejo amarillo.

𝐖𝐈𝐋𝐃𝐄𝐒𝐓 𝐃𝐑𝐄𝐀𝐌𝐒 (𝐖𝐈𝐋𝐋𝐈𝐀𝐌 𝐀𝐅𝐓𝐎𝐍*𝐒𝐓𝐄𝐕𝐄 𝐑𝐀𝐆𝐋𝐀𝐍)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora