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21: Ahí va el vecindario
Descargo de responsabilidad: no soy dueño de Naruto ni de Street Fighter. Ayer un desconocido bombardeó mi coche con una bomba incendiaria. Lamentablemente, mi reproductor MP3 no logró salir del infierno. Kishimoto, ¡esto significa guerra! ¡Mis 8 GB serán vengados!

Capítulo 21: Ahí va el vecindario

Para aquellos que nunca han quedado inconscientes, es una sensación muy extraña, por decir lo menos. Incluso antes de abrir los ojos, lo primero que regresa a usted es la capacidad de oír. Donde antes era una especie de ruido blanco zumbido, el ruido comienza a aclararse y volverse cada vez más coherente y con menos eco hasta que se restablece por completo.

A partir de ese momento tu sentido del sentimiento regresa e intentas moverte. Sólo en ese momento, cuando intentas y fallas debido al reciente reinicio de tus habilidades motoras, te das cuenta de que tus ojos están completamente abiertos y que la razón por la que no podías ver era porque te estabas reajustando a la luz.

Este es el destino que encontró Uzumaki Naruto al despertar. Casi se sentía como un lunes por la mañana después de un domingo entero de entrenamiento duro, especialmente la parte en la que se despertó en su propia cama. La parte que no le resultaba familiar era el hecho de que estaba envuelto con todo su cuerpo cubierto con una gasa desde la cabeza hasta los pies, y que todo su cuerpo le dolía muchísimo.

Sin embargo, Naruto nunca se quedó abajo cuando no era necesario, se sentó y se quitó el edredón solo para poner los ojos en blanco ante el hecho de que estaba completamente desnudo. Mientras tiraba de los cables conectados a la máquina que monitoreaba sus signos vitales que habían sido transportados a su habitación, interiormente agradeció a cualquier deidad responsable por estar en su habitación con su desnudez.

Luego maldijo a la misma deidad por la autoextracción del catéter que tenía dentro. Gracias Tsunade-baachan por esa información que nunca perdió debido a lo traumático que fue aprender. No iba a permitir que alguien más le quitara un catéter mientras estaba despierto para evitarlo... preferiría caer él mismo sobre esa granada.

Con pasos pelirrojos se levantó de la cama y se puso un par de boxers y pantalones cortos deportivos antes de abrir la puerta y salir al pasillo hacia la sala de estar, guiado por el sonido del televisor.

No esperaba ver a Batsu sentado allí con su uniforme escolar azul normal jugando perezosamente videojuegos. Había un juego de disparos en primera persona en la pantalla y tenía unos auriculares puestos, por lo que obviamente estaba jugando en línea. "¿Quién es el imbécil corriendo con la escopeta Striker?" Preguntó por el auricular: "¿Por qué estoy enojado? Estoy enojado porque un Striker con 'alcance' es casi un hack, hijo de puta. Voy a conseguir un lanzagranadas en el próximo partido y luego te romperé el trasero".

Encogiéndose de hombros, Naruto caminó hacia el sofá y se sentó junto a Batsu para ver el juego. A Batsu realmente no le importaba que alguien se hubiera sentado a su lado porque estaba en una racha de asesinatos. Esto continuó hasta que terminó el juego y Batsu giró su cabeza hacia la persona que estaba casi en su espacio personal. Luego pareció como si hubiera visto un fantasma y saltó completamente de la silla, "¡Mierda! ¡Deberías estar muerto!"

"¿Qu-?" Naruto respondió 'inteligentemente' antes de mirarse a sí mismo, "Bueno, siento que debería serlo. ¿Eso cuenta?"

Batsu miró fijamente a Naruto hasta que pudo calmarse. A partir de ese momento, Batsu apagó serenamente la consola de juegos y se sentó junto a su amigo cercano, tomándose un momento para hablar antes de hacerlo, "Está bien, déjame explicarte... así que vuelvo a la ciudad después de un mes de entrenamiento increíble en el desierto con "Mi papá, y él me deja en la casa de mi mamá. Entro por la puerta, y ella me está dando una mirada preocupada, y estoy a punto de asustarme antes de que me diga que aparentemente estás a punto de morir. Inmediatamente Deja de preocuparte a partir de ese momento."

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