Espero que este capitulo sea de su agrado, ya que me mate haciéndolo, así que les pido que comenten y dejen su estrella.
Y les paso a comentar que quizás la historia pase de un formato trimestral a un formato mensual
Sin más disfruten el capitulo de la historia de nuestro gallo.
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Un nuevo día azotaba la capital y con ello, la luz solar se filtraba por la base de Night Raid y con ello deslumbrando las acciones de todos ellos, algunos comiendo, entrenando, vistiéndose y por último durmiendo que es lo que estaban haciendo Tatsumi e Itadori.
Tatsumi despertándose por un sueño que tuvoe Itadori con una pesadilla, de todos los momentos traumáticos que vivió en el incidente de Shibuya y más.
Sueño de Itadori
En una ciudad destrida, en llamas, humanos mutados, un gran meteorito; estaba Itadori y delante de él a Nobara sin una parte de su rostro, Nanami calcinado, Megumi herido, Todou con una mano faltante, la prisión de Gojo, y demás compañeros hechiceros en mal estado; escena que dejó en completo shock a Itadori, y mientras que Itadori observaba el panorama todos rodearían al pelirosa y la boca y ojo de Sukuna se manifestarían riéndose del chico pero lo que más dejaría paralizado a Itadori sería escuchar la voz de su abuelo diciéndole sus últimas palabras y algo más.
—¿Yuji por qué asesinaste a esas personas? yo te pedí que ayudaras a los demás, no que los perjudicadas
—AJAJAJA ESTUPIDO MOCOSO, SIEMPRES HECHAS A PERDER TODO, ¡¡¡¡NO PUDISTE SALVAR A ESE ESTÚPIDO DE SATORU GOJO Y MENOS LO PODRAS HACER CON ESTA GENTE!!!! JAJAJA
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Después de esa pesadilla Itadori se despertaría muy agitado y observando la habitación y se daría cuenta que solo fue un mal sueño.
—Solo fue una estúpida pesadilla, voy a ver si Akame-san ya preparo el desayuno o apenas lo va a hacer para ayudarla-*suspiro*- espero que mis amigos estén bien después de Shibuya; sobre todo Fushiguro, Kugisaki, Todou y hayan podido liberar a Gojo-sensei.
Después de que Itadori haya recogido el cuarto y cambiarse a una ropa más casual, tomaría rumbo a la cocina para ayudar a la pelinegra con el desayuno, pero viendo que no había nadie en el comerdor y que solo estaba un plato de comida, supuso que ya habían desayunado e ido a entrenar o a cualquier parte de la base, así que solo tomaría asiento y procedería a comer la comida hecha.
—La comida estuvo muy deliciosa, le voy a agradecer a Akame-san, aunque me pregunto porque no me habrán despertado.— al cabo de un rato Itadori recogería los trastes que utilizo y los lavaría en el fregadero y los pondría en su lugar correspondiente, y saldría a buscar a la peli azabache para agradecerle por la comida.
Al cabo de unos minutos caminando buscando a la oji-roja se toparia a Bulat entrenando.
—Buenos días Bulat-san, veo que estas entrenando desde muy temprano.— hablaba Itadori con una leve sonrisa y un saludo
